Detenido por tercera vez el atracador Sabonis por el asesinato de un policía en Madrid en 1996
La policía ha detenido en Madrid al conocido atracador Ángel de Amor Pastor Mesquida, más conocido como Sabonis, de 27 años, por el asesinato del policía José Antonio Maricalva, de 42 años, el 5 de noviembre de 1996, en Madrid. Ésta es la tercera vez que la policía logra echarle el guante desde entonces, ya que Sabonis había quedado en libertad en las dos anteriores hasta que se resolviera un recurso que presentó contra la condena que recayó sobre él por ese asesinato. El tiempo que ha permanecido en libertad lo ha aprovechado para incrementar su ya abultado historial de robos en casas, joyerías, bancos y furgones blindados.
La banda de Sabonis atropelló violentamente a un policía al ser descubierta cuando ultimaba un atraco en la calle de Ponts de Molins del Puente de Vallecas. Sabonis y los suyos fueron detenidos esa misma noche y enviados inmediatamente a prisión. La banda fue condenada a penas de más de 100 años, pero todos recurrieron. Tras pasar cerca de dos años en prisión, Sabonis fue puesto en libertad hasta que se resolviera su recurso.
Sabonis volvió a ser detenido en mayo de 2003, acusado de haber robado a 13 personas por el procedimiento del cogotazo (un golpe por la espalda al cliente de un banco que acaba de sacar dinero). Pero tampoco entonces dio con sus huesos en la cárcel, por razones que las fuentes policiales consultadas no logran explicarse.
Sabonis fue implicado en abril de 2004 en un intento de asalto a un conocido bingo de Madrid, y el año pasado fue identificado como el autor del robo a un joyero de Orihuela (Alicante). Desde entonces, su pista se había difuminado e incluso había conseguido un trabajo en una inmobiliaria del paseo del Doctor Vallejo. Pero hace unas semanas, durante una operación sobre una banda de atracadores albano-kosovares en Valencia, los investigadores creyeron verle merodeando con ellos. La pista sobre esa banda condujo a Madrid, donde Sabonis, cuyo corpulento aspecto es inconfundible, fue vuelto a ver. Dado que el recurso ya había sido resuelto y la condena por el asesinato es firme, la policía procedió a detenerlo cuando se dirigía de la oficina inmobiliaria a su coche, al que le impidieron que subiera para evitar que, en una huida, volviera a matar por atropello a otro agente.
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