Madrid, área 'hip-hop'

De rotundo éxito cabe calificar la segunda edición del Festival Cultura Urbana 2006, promovido por el Ayuntamiento de Madrid, la Fundación Autor y varios sellos discográficos, amén de otros patrocinadores, cuya primera jornada se saldó con una asistencia en torno a las 18.000 personas. A la vera del Manzanares, junto a una de las áreas más reventadas por las obras del alcalde, una muchedumbre de jóvenes cuya edad oscilaba entre los 15 y los 30 años colmó las expectativas de asistencia a un festival excelentemente bien organizado y con más comodidades que las que puede ofrecer una concentración de estas características.

El enclave, el antiguo matadero de Legazpi, era inmejorable: una ancha calle en la que desembocaban varios enormes pabellones que alojaban actividades distintas. En uno de ellos, varios de los mejores DJ amenizaban la visita que el público hacía a los diversos stands de objetos relacionados con la cultura urbana. Junto a él, en otro pabellón, una increíble selección de artistas del graffiti, artistas en el lenguaje del hip-hop, planteaban sus obras enormes en las paredes. La sensación era la de asistir a la decoración de una especie de Capilla Sixtina en plan urbano y pagano. Un tercer escenario acogía una excelente selección de artistas del funk, entre los que destacaban los grupos Sweet Vandals y Celofunk.

En otro escenario se plantearon dos de las actividades más interesantes de este festival. Atendiendo al culto a la sana competición, que es una característica fundamental del hip-hop en todas sus manifestaciones, se produjeron las semifinales de una encendida batalla incruenta de mc's (maestros de ceremonia) y posteriormente otra no menos atractiva de bailarines de breakdance. En ambos casos, el público puso especial pasión en los enfrentamientos.

Naturalmente, el escenario que más interés concitó era el central, una enorme nave en la que desde las cuatro de la tarde sonaron las rimas y los ritmos de varias de las más importantes formaciones de rap español. Por allí pasaron artistas emergentes, como los que forman parte del catálogo del sello discográfico de Torrejón Ángel Face, las rimas de la formación Gamberros All Stars, que utilizan bases rítmicas que proceden del jazz. También desde Barcelona se hizo oír la voz del rapero Tremendo Menda, perteneciente a la escudería de la importante formación Solo Los Solo. Acto seguido, otro de los triunfadores de la noche: el rapero de Alcorcón Zenit.

Cuando ya el sol había caído y la temperatura empezaba a bajar un poco, llegaron las actuaciones más potentes de esta primera velada, a cargo de la gerundense Arianna Puello, una de las reinas del estilo en nuestro país. Después de ella llegó el turno de otra formación importante, Hablando En Plata, grupo que polarizó aún más si cabe la atención del público asistente.

La atmósfera quedó en el punto ideal para que hiciesen su entrada en escena la legendaria formación de Zaragoza Violadores del Verso, con una puesta en escena tan enérgica y participativa como suele ser habitual en sus conciertos.

Tras la soberbia actuación de los maños, a las doce menos cuarto cerraba la primera noche el alicantino Nach, quien presentaba los temas de sus dos últimos albumes Ars Magna / Miradas. Llegados a este punto, los asistentes a esta primera jornada del Cultura Urbana 2006 estaban ya en éxtasis.