Crevillent compra el material de seguridad a una firma de comidas

La portavoz del grupo municipal del PSPV en Crevillent, Esther Asensio, afirmó ayer que la empresa que asesora al alcalde, César Augusto Asencio, del PP, en materia de seguridad, la firma COES, y a la que también compra el material para equipar a la Policía Local corresponde en realidad a una firma "de catering escolar con el mismo nombre". Los grupos en la oposición en el Ayuntamiento de Crevillent vienen denunciando hace meses la contratación irregular de una empresa para instruir a la Policía Local.

El Ayuntamiento ha comprado a esa empresa diverso material como porras extensibles de acero reforzado, chalecos antibalas o grilletes. Tras un seguimiento, la portavoz del PSPV explicó ayer que las facturas van a nombre de COES, la empresa contratada por el alcalde pero sin el número de identificación necesario, sino con el documento de identidad del director, el ex guardia civil instructor. Además, la dirección de la empresa así como el teléfono, según Asensio, "se corresponde con una empresa situada en Alicante, con ese nombre pero que se dedica al catering para comedores escolares".

El Ayuntamiento de Crevillent informó ayer de que este año se ha destinado una partida presupuestaria de 213.122 euros para equipamiento para la policía local e incluso en la última modificación de créditos ya se consignó una partida adicional para este fin. Con este dinero se ha comprado, entre otras cosas, 11 chalecos antibala, 11 grilletes inmovilizadores, 11 bolígrafos especiales de punta dolorosa frente a resistencias en las detenciones y 11 porras extensibles. Además, se va a comprar dos teléfonos móviles para que los agentes de la unidad especial que se ha creado, llamado Grupo Especial de Seguridad, puedan disponer de una cámara con posibilidad de grabar en vídeo secuencias de quince segundos. La subdelegación del Gobierno ya denegó la posibilidad de instalar cámaras de video vigilancia en las calles de la localidad, y también se ha denegado la solicitud para que los integrantes de este grupo vayan sin el uniforme reglamentario, tal y como pidió el alcalde de Crevillent para funcionar a modo de "policía secreta".

Polémico instructor

El instructor de este grupo especial, un ex-guardia civil, según el PSPV, expulsado del cuerpo y con asuntos pendientes con la justicia, causó ya una gran polémica en la localidad por el modo en que se llevó la contratación de la empresa de seguridad, dirigida por el instructor.

El empeño del alcalde por controlar y la seguridad ciudadana surgió en Crevillent tras una manifestación ciudadana y algunos incidentes entre vecinos y colectivos de inmigrantes. Desde entonces se ha incrementado la plantilla de agentes de la Guardia Civil y sobre todo de la policía local que ha pasado de 28 policías efectivos en el año 1995 a los 56 actuales.