Los empresarios españoles esperan contratos en Arabia Saudí tras la visita de los Reyes

ENVIADO ESPECIAL,

Empresarios españoles que han acompañado a los Reyes don Juan Carlos y doña Sofía en su viaje a Arabia Saudí se mostraron ayer, poco antes de que se despidiera la comitiva, muy satisfechos del desarrollo de la visita y afirmaron que esperan cerrar contratos incluso "en pocas semanas", en algunos casos. Un representante de la Secretaría de Estado de Comercio indicó, por su parte, que la Compañía Española de Financiación al Desarrollo (Cofides) será, probablemente, la agencia gubernamental española que se encargará de impulsar la creación de un fondo mixto de inversión de 5.000 millones propuesto por los saudíes.

En una breve conversación con la prensa, a la que asistieron Carlos Pérez del Bricio, por Cepsa, Raimundo Fernández Cuesta, por Repsol, y Juan María Nin, consejero delegado del Banco de Sabadell, entre otros, se insistió, en efecto, en que los interlocutores sauditas que se reunieron el domingo con los empresarios españoles habían sido "de nivel muy alto" y "adecuados" para lograr el objetivo de acotar campos de interés.

Estos campos de interés se centran en energía, infraestructuras, tecnologías y defensa. Los encuentros de estos días también han servido para encauzar sólidamente unas negociaciones que abren "posibilidades considerables de cerrar acuerdos".

Los empresarios españoles se mostraron ayer convencidos de que Arabia Saudí, al calor de los elevados precios del crudo, vive "una dinámica inversora muy potente, como en los años setenta", y manifiesta gran interés en la capacidad española de cara a ese proceso.

Trato similar de Francia

Los directivos consideraron significativo, en ese sentido, que España haya sido convocada por la Administración saudí a estos contactos de alto nivel, similares a los mantenidos por este país con Alemania y Francia recientemente.

También aprecian que la creación del fondo de capital privado, similar a los que ya funcionan con América Latina, con países asiáticos o del Este europeo, facilitaría la financiación del gran salto que se pretende desde unas relaciones económicas que hoy prácticamente se limitan al intercambio comercial, de unos 3.500 millones de euros al año, deficitario para España en un 80%.

El éxito de la operación dependerá, sin embargo, de la capacidad de la Compañía Española de Financiación al Desarrollo y su equivalente saudí para convencer a bancos, fondos de pensiones y otros inversiones institucionales de que invertir en España y Arabia Saudí es rentable.

En la despedida, la Reina dio espontaneamente un paso para besar al Príncipe Salman, que le fue a despedir. Un poco sorprendido, el Príncipe se echó para atrás para evitar el beso riéndose. La Reina sonrió también y todo quedó como una broma.