700 multas por orinar, en los dos primeros meses de la ordenanza

En los dos primeros meses de la aplicación de la nueva ordenananza de civismo y convivencia, el Ayuntamiento de Barcelona ha impuesto 7.056 denuncias. Y el 10% de ellas -exactamente 695- corresponden a personas que han orinado en la calle y que han sido pilladas haciéndolo. La cifra no deja de sorprender incluso a los propios responsables del consistorio, preocupados porque esas infracciones no van a la baja.

En un seguimiento de las sanciones impuestas en el último trimestre de 2005 por agentes de la Guardia Urbana por hacer las necesidades fisiológicas en la calle, el número de multados por ese motivo ya era abultado. La instalación de algunas cabinas en lugares céntricos de Ciutat Vella no ha parecido surtir demasiado efecto y el elevado número de sanciones impuestas en los dos primeros meses marca lo que parece ser una nueva tendencia. Las sanciones pueden ser de hasta 300 euros y, a diferencia de lo que ocurría hasta la aprobación de la ordenanza, el impago puede acabar en embargo de las cuentas bancarias.

Porcentualmente, el mayor bloque de sanciones (1.875, el 26%) es por venta ambulante, especialmente de bebidas y alimentos. El 24,62% (1.737), por pintadas o pegar carteles. El 16% (1.170), por consumo de bebidas alcohólicas. Por ofrecer servicios sexuales en la calle se han impuesto 692 sanciones, 93 de ellas a los clientes. Y otro de los capítulos que resultaron ser más conflictivos a la hora de aprobar la ordenanza, la mendicidad, es uno de los que menos actividad sancionadora han desencadenado, concretamente se han impuesto 166 multas. De éstas, 81 por hacerlo de forma organizada, 43 por impedir el tráfico, 17 por utilizar a menores y 15 a limpiacristales.

Las cifras fueron presentadas ayer en la comisión de presidencia, donde también se confirmó que el presupuesto asociado al cumplimiento de la ordenanza en 2006 es de casi 32,5 millones de euros. En la comisión también se presentó la campaña informativa que ha iniciado el Ayuntamiento sobre la ordenanza con la distribución de 150.000 folletos, de momento en castellano y catalán, y posteriormente en cuatro idiomas. Esta información deja claro que quien utilice mal el espacio público será sancionado: "Quien rompe paga".

En la comisión, la oposición y el equipo de gobierno se enzarzaron a propósito de las cuentas presentadas por las empresas municipales. CiU criticó, por ejemplo, que el Ayuntamiento recaudara más de lo que invirtió en la implantación del área verde el año pasado.