Los comerciantes cifran en 200.000 euros los daños causados por los actos vandálicos en el Raval

Unos 200.000 euros. Ésta es la cuantía que pueden alcanzar los daños originados por los actos vandálicos que en la madrugada del sábado se perpetraron contra numerosos comercios del barrio del Raval, en Barcelona. Son, al menos, las estimaciones de la Federación de Comerciantes del Raval, que ayer hizo balance de los altercados.

El presidente de la federación, Enric Sánchez, dijo que hay 25 locales afectados. La mayoría presentan desperfectos en la cristalera y en las persianas, aunque algunos también fueron víctimas del pillaje y perdieron cuantioso material. Sánchez aseguró que "la gran mayoría" de los comercios han reabierto ya sus puertas y han reanudado su actividad habitual. Aunque el propietario de una panadería que también estuvo presente en la conferencia de prensa aseguró que su local deberá permanecer cerrado durante "dos o tres días" hasta que se lleven a cabo las obras de reparación. "Aún falta por incorporar algunos comercios a la lista de agraviados", admitió Sánchez.

Los comerciantes temen, además, tener problemas para cubrir los gastos, ya que no todas las compañías de seguros cubren los daños causados por vandalismo. "Dependerá del tipo de póliza que tenga cada uno", sostuvo Sánchez. Ante esta posibilidad el presidente aseguró que la federación buscará "las vías necesarias" para que la Administración se haga cargo del pago de las indemnizaciones.

A través de un comunicado, los comerciantes expresaron su "indignación" por la violencia que se sucedió el viernes en el barrio tras la celebración del macrobotellón. Además, se declararon "hartos" de que algunas personas utilicen el barrio "para hacer sus reclamaciones" y pidieron que incidentes de esta magnitud "no vuelvan a repetirse". Sánchez eludió evaluar la actuación de las fuerzas de seguridad y dijo que, en principio, el despliegue de unos 350 agentes les parecía más que suficiente.

Como señal de protesta por lo ocurrido, la federación hizo ayer un llamamiento a los comercios para que mañana bajen sus persianas entre las 12.00 y las 12.30 horas. Los convocantes cuentan con el apoyo de la Federación de Comercio de Barcelona y con los puestos del Mercado de la Boquería, que apagarán sus luces durante esa media hora.