Los 500 ducados de Elcano

Lo primero fueron las colaboraciones con Evening news o Weekend; luego la escritura de más de 200 manuales didácticos para aprender inglés. Y ya, cerca de los 60 años, le llegó el turno a la literatura en serio. Había publicado dos novelas en inglés, Desert fugitives y Desert commandos, un divertimento frente a lo que estaba por llegar: una novela sobre Juan Sebastián Elcano, Los Navegantes, que en su edición definitiva, publicada por Edhasa, supera las 800 páginas.

Si el rigor histórico es imprescindible en toda narración que recrea tiempos pasados, Edward Rosset (Oñati, 1938) superó todas las exigencias en este caso. Le escribió tres cartas al rey Juan Carlos I para que solventara las deudas que la monarquía española había contraído con el marino de Getaria. Según está documentado, Elcano había estado guerreando al servicio del cardenal Cisneros, en Argelia, y nunca le llegó ni un ducado por aquella encomienda en la que se empleó durante tres años, teniendo que pagar de su bolsillo a la marinería.

"Al final, los banqueros italianos le requisaron el barco, regresó a España, donde le persiguieron los acreedores y se tuvo que refugiar en Sevilla, donde llegó a embarcarse en la expedición de Magallanes". Elcano, después de un periplo infernal, se convirtió en el héroe de una aventura que no había preparado. Así y todo, nadie reparó sus gastos en Argelia. Rosset sólo pedía al actual monarca un gesto. "Nunca llegó, la Casa Real me remitió una carta de agradecimiento y punto. Yo quería un cheque cruzado [que no se puede cobrar] por valor de 500 ducados que es lo que calculo que se gastó Elcano", indica Rosset. Un documento que, además, se podría exhibir en el futuro museo que preparan en Getaria sobre el marino.