La fiscal del 11-M pide al juez Del Olmo que prorrogue la prisión preventiva para cinco imputados

La fiscal de la Audiencia Nacional Olga Sánchez reclamó ayer al juez Juan del Olmo que prorrogue de dos a cuatro años la prisión preventiva para cinco de los imputados por su presunta participación en los atentados cometidos el 11 de marzo de 2004 en los trenes de cercanías de Madrid.

Se trata de Jamal Zougam, Emilio Suárez Trashorras, Rafa Zouhier, Basel Ghalyoun y Hamid Ahmidan, que en los próximos días cumplen los dos años de prisión preventiva. La ley exige la revisión de su situación personal. Los abogados defensores solicitaron su puesta en libertad.

Para hoy está previsto idéntico trámite para otros cuatro de los acusados: Otman el Gnaout, Rachid Aglif, Abdelilah el Fadual el Akil y Fouad el Morabit.

El juez Del Olmo decidirá previsiblemente esta misma semana la prórroga de la prisión de todos ellos, por entender que existen indicios de criminalidad suficientes contra ellos. El magistrado tiene ya muy avanzado el auto de procesamiento del 11-M, en el que recogerá detalladamente la participación de estos imputados en los hechos, y lo notificará a las partes poco después del segundo aniversario de los atentados, según fuentes de la Audiencia.

Las comparecencias en el juzgado siguieron el guión previsto. Jamal Zougam negó todos los hechos que le imputan y declaró en castellano durante unos 50 minutos que nunca estuvo en los trenes de la muerte.

Gerardo Turiel, abogado defensor del ex minero asturiano Emilio Suárez Trashorras, que presuntamente proporcionó la dinamita goma-2 Eco con la que se perpetraron los atentados al comando islamista, alegó que la situación médico-psicológica de su cliente -padece esquizofrenia paranoide- ha empeorado en los dos años que lleva en prisión.

Rafa Zouhier también negó las acusaciones contra él y su pertenencia a cualquier banda terrorista. Según fuentes de la defensa, Zouhier declaró que "la única banda armada con la que ha colaborado ha sido la Guardia Civil, que es el único cuerpo armado que conoce". Zouhier fue confidente del instituto armado para temas de droga, pero el juez dejó claro en sus resoluciones que nunca avisó con anticipación del atentado, sino sobre la peligrosidad del jefe logístico del grupo, Jamal Ahmidan, El Chino, el día 17 de marzo.

Basel Ghalyoun, que fue visto en los trenes, negó que hubiera estado allí y dijo que siempre ha colaborado con la justicia para esclarecer lo ocurrido. Agregó que nunca ha ocultado que conoció a El Chino y otros de los suicidas de Leganés, y que si fuera culpable no habría hablado con ellos desde su teléfono, sino que se hubiera buscado otro.