El alcalde de Gibraleón negocia la tasación de los terrenos que quería recalificar el PP

El alcalde de Gibraleón (Huelva), el independiente Juan Serrato, está negociando con los promotores que firmaron cuatro convenios urbanísticos con el anterior equipo de gobierno municipal, del PP. Serrato quiere aumentar la tasación que hizo el anterior gobierno de los terrenos, que suman 214 hectáreas y que iban a suponer unos ingresos de 7,9 millones de euros para el Ayuntamiento. Serrato, que salió del PSOE tras la moción de censura que desbancó de la alcaldía al PP, considera que el Ayuntamiento debe ingresar 13,2 millones de euros. Si se llega a un acuerdo con los promotores para aumentar la tasación, los convenios se incluirán en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad.

Serrato subrayó ayer "la buena disposición" que han mostrado los cuatro promotores de los convenios urbanísticos suscritos por el anterior alcalde, José Ramón Gómez Cueli (PP), para aceptar la tasación real de los terrenos. Serrato no se aventuró a asegurar si los convenios se incluirán finalmente en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), pero precisó que "la impresión es muy positiva".

Si los convenios no se incluyen en el PGOU, los promotores no podrán edificar en el terreno que han adquirido, puesto que hasta que no formen parte del planeamiento no se acometerá la recalificación del suelo. Serrato tiene previsto mantener otra reunión antes de cerrar las negociaciones. "Todo apunta a que vamos por buen camino", dijo.

De los cuatro empresarios, dos han expresado ya "abiertamente" su conformidad a abonar la diferencia del valor del suelo. Se trata del promotor del proyecto El Rincón, que prevé la construcción de 676 viviendas en una superficie de 338.230 metros cuadrados y el del plan El Pintao, que contempla la edificación de 478 viviendas sobre una superficie de 243.330 metros cuadrados.

Los empresarios del plan de Nuevo Coto Galindo y de Los Salones "concretarán su postura definitiva en un próximo encuentro", dijo Serrato. Estos dos últimos planes son los más ambiciosos, ya que concentran el mayor número de viviendas y se ubican en una zona privilegiada del municipio.

El proyecto Nuevo Coto Galindo es el único meramente turístico. Contempla viviendas, hoteles y un campo de golf. Tiene una superficie 1.156.550 metros cuadrados y prevé la construcción de 1.734 viviendas. El PP vendió ese suelo por 2,3 millones de euros cuando el precio real de mercado es de 3,8 millones de euros, según la tasación del actual gobierno local. La diferencia es de 1,5 millones de euros. Se trata de un terreno próximo a la autovía Huelva-Ayamonte, a 12 kilómetros de Gibraleón y a siete de Cartaya.

El convenio de Los Salones es residencial. Contempla la edificación de 1.497 viviendas en una superficie de 404.570 metros cuadrados. El PP vendió el suelo a 2,6 millones de euros cuando su valor real es de 5,05 millones de euros. La diferencia asciende a 2,4 millones de euros. Ese convenio es el más próximo al núcleo urbano. Con la futura autovía Huelva-Gibraleón quedaría a cinco minutos de la capital onubense.

Los cuatro convenios prevén la recalificación global de 214 hectáreas para la edificación de 4.385 viviendas y chalés de lujo en terrenos privilegiados del municipio. El PP había vendido a los empresarios ese suelo a 7,9 millones de euros, un precio inferior al del mercado, que asciende a 13,2 millones de euros, lo que supuso una merca de 5,3 millones de euros para el Ayuntamiento.

La baja tasación de los terrenos fue el principal argumento que esgrimió Juan Serrato en noviembre pasado para poner la moción de censura contra José Ramón Gómez Cueli, con el apoyo de una edil tránsfuga del PP, Esperanza Ruiz.

El PSOE, que defendió inicialmente la iniciativa, la desautorizó luego y Serrato y sus concejales prosiguieron con la moción como independientes. "El PP se negaba a revisar los convenios, con lo que tenía paralizado el plan general y el desarrollo del municipio", afirmó Manuel Ceada, concejal de Urbanismo. Y agregó: "Lo primero que hicimos cuando llegamos al gobierno fue revisar la tasación de esos planes y sentarnos con los promotores a negociar".