Un comunicado atribuido a los GRAPO reivindica el asesinato de una empresaria

Un comunicado atribuido a los Grupos Revolucionarios Antifascistas Primero de Octubre (GRAPO), recibido ayer en varios medios de comunicación de Zaragoza, reivindica para esta banda casi extinta la autoría del asesinato de dos disparos de la empresaria Ana Isabel Herrero, de 44 años, ocurrido el 6 de febrero en la calle de Cervantes de la capital aragonesa. El Ministerio del Interior considera que la reivindicación es "razonablemente veraz" e investiga si los autores del crimen son Israel Torralba (quien mató a un policía en 2000), Juan García Martín e Ismael Clemente.

En la nota, de dos folios y con el sello y la literatura habitual de la banda y del PCEr (su brazo político, ilegalizado), el llamado "comando José María Sánchez Casas" (cofundador de la banda, muerto en 2001 y que estuvo 18 años en presidio), reivindica el asesinato de la mujer y las heridas causadas a su marido, Francisco Colell Farré. "El objetivo del operativo", dice el escrito, "era expropiarles una determinada suma de dinero en concepto de impuesto revolucionario y así se les hizo saber en el momento en el que fueron abordados, explicándoles nuestros combatientes que tenían orden de ejecutarlos inmediatamente si se negaban al pago. En lugar de atender razonablemente nuestras exigencias, ambos optaron por el enfrentamiento, resistiéndose a su retención".

Colell sostuvo desde el primer momento que los asaltantes eran de los GRAPO y que como tal se les presentaron. La pareja se disponía a sacar el coche de su garaje, situado junto a una de las oficinas de la empresa Arquitempo, de la que son propietarios, en el número 17 de la calle Cervantes. Colell ha reconocido a dos de los tres pistoleros: Israel Torralba e Ismael Clemente. El tercer terrorista puede ser Juan García Martín, que fue reconocido por uno de los testigos.

Pese a esta declaración, desde el primer momento se barajó el móvil económico y que los autores buscaban un "secuestro exprés" para lograr dinero rápido. Colell y su mujer son propietarios de Arquitempo, una empresa de trabajo temporal de servicios extendida por 30 provincias y con más de 2.000 trabajadores. Ahora ponían en marcha otra sociedad, Soluciones Expo, para aglutinar esfuerzos de empresas medianas con la Exposición Internacional de la ciudad, que se celebrará en 2008.

El día del atentado la pareja había salido de su empresa en la calle Cervantes y tras tomar unas consumiciones en un bar se dirigieron al garaje, en el número 11 de la misma calle. Fue entonces cuando les abordaron los pistoleros. Dos de ellos eran más jóvenes y un tercero, identificado como Juan García Martín, parecía dirigir la operación. Tras escuchar cómo les exigían dinero, Ana Isabel Herrero echó a correr pero no pudo llegar a la calle. Dos tiros acabaron con su vida. Su marido entró en el coche. Allí descargaron un revólver sobre él. Tres tiros le hirieron de gravedad.

A pesar de que el sello de la nota y de que parte del texto es casi calcado de otros comunicados del PCEr de 2005, las fuerzas de seguridad mantenían ayer la cautela. Esta prevención se basa en que creen que ese comando ya no es propiamente de una organización terrorista sino un grupo de delincuentes comunes dedicados al "terrorismo de subsistencia". Los GRAPO jamás han anunciado su disolución, aunque estuvieron a punto de hacerlo en 1997, tras las negociaciones llevadas a cabo por el Gobierno del PP con varios interlocutores de la banda en la cárcel de Sevilla II.

El secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, tildó ayer la reivindicación de "razonablemente veraz". "Nos encontramos", dijo en Bruselas, "ante un acto cometido por una organización que debemos calificar como mafiosa, cuyos actos son difíciles de distinguir de la delincuencia común, que están destinados a conseguir la subsistencia de determinadas personas". En esta línea, el delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández, matizó: "Es evidente que alguna persona ligada a lo que históricamente conocimos como GRAPO puede estar tras esta acción. Pero la investigación y diversas pruebas pueden llevarnos a una conclusión u otra".

Torralba es el presunto autor del asesinato del policía Francisco Javier Sanz Morales, perpetrado el 17 de noviembre de 2000 en Madrid, como respuesta a la desarticulación en París de la cúpula de la organización ocho días antes. Ayer mismo, Francia extraditó a la miembro de los GRAPO Josefina García Aramburu, acusada de diez atentados con bomba y del asesinato de un policía en Barcelona en 1982.