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Irún y Hondarribia prefieren la propuesta de AENA de no ampliar el aeropuerto

Los vecinos afectados rechazan la solución de la Diputación de alargar 300 metros la pista

Mikel Ormazabal

El proyecto de mejora del aeropuerto de Hondarribia no acaba de despegar y vuelve a ser un motivo de disputa entre las instituciones implicadas. Es una incógnita si la pista de vuelos se reducirá en 300 metros para crear una franja de seguridad, como plantea AENA, o si prosperará la solución defendida por la Diputación de Guipúzcoa, que consiste en ampliar el aeródromo ocupando terrenos del barrio de Mendelu. Los ayuntamientos de Irún y Hondarribia se decantan por la primera opción, porque no acarrea ningún quebranto para los vecinos ni para el medio ambiente.

Han transcurrido casi cinco años desde que el Gobierno del PP aprobó el Plan Director del aeropuerto y todavía se desconocen los cambios que se van a introducir en esta infraestructura. Aquel proyecto, que implicaba invadir 600 metros del barrio de Mendelu, fracasó tras la contundente respuesta de todas las instituciones vascas y de los vecinos. Con la llegada de los socialistas al Ministerio de Fomento, AENA retomó el plan y presentó en noviembre pasado un borrador que contiene hasta siete soluciones. De este abanico de posibilidades, se decanta por la que menos afecciones ocasiona. Consiste en mantener la pista tal cual, pero reserva 300 metros de la misma para crear una zona de seguridad, como obliga la nueva normativa de la Organización Internacional de Aviación Civil (OACI).

Esta opción no satisface plenamente a la Diputación, porque en la práctica, sostiene su portavoz, Koldo Azkoitia, supondría reducir la longitud de la pista -de los 1.754 metros actuales a 1.454- y poner en riesgo la operatividad de los turborreactores medios. La institución foral, que ha emitido un informe desfavorable a la propuesta de AENA, prefiere una solución intermedia entre el viejo plan director y la última solución planteada por los socialistas. Se inclina por respetar la distancia actual de la pista y ocupar 300 metros de Mendelu para que tenga 150 metros de área de seguridad en cada extremo. De este modo, explica Azkoitia, en Hondarribia podrían aterrizar aviones de mayor tamaño y operar compañías que ofrecen vuelos de bajo coste.

Fomento todavía no ha dado una contestación a la Diputación. Tiene seis meses de plazo para aceptar o rechazar el proyecto foral. De entrada, ya no cuenta con el apoyo de los vecinos de Mendelu. La Coordinadora Contra la Ampliación de la Pista del Aeropuerto ha expresado su "rechazo frontal" a la iniciativa de la Diputación y critica que haya apostado por ampliar el dominio aeroportuario "de forma unilateral" y sin contar con el resto de instituciones y los afectados, afirma su portavoz Javier Campos. En una carta que han remitido al diputado general guipuzcoano, Joxe Joan González de Txabarri y con copia a Fomento, advierten de que la ampliación supone hacer un puente sobre la ría de Jaizubia, lo que podría ocasionar inundaciones en la zona.

El teniente de alcalde de Hondarribia, Aitor Kerejeta, del PNV, también coincide con la solución de AENA, porque "no produce ninguna afección". No obstante, este municipio no pondrá obstáculos a la elegida por Diputación si previamente existe un acuerdo con el Gobierno central y los vecinos. El socialista José Antonio Santano, alcalde de Irún, apuesta por "no ampliar la pista", como defiende Fomento porque "se asemeja a la que hemos pedido las instituciones vascas desde un principio". Lamenta haber conocido la propuesta foral "por los medios de comunicación" y ha encargado un estudio para cuantificar los daños que ocasiona la ampliación en el desarrollo residencial previsto en el barrio de San Miguel-Anaka, donde se construirán 1.100 viviendas (700 de VPO). "Lo lógico hubiera sido que hubiésemos presentado una propuesta conjunta, en lugar de hacerlo la Diputación por separado sin contar con Irún y Hondarribia", concluye.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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