La presidenta quiere reunirse con Fomento para atajar los ruidos del 'nuevo Barajas'

Varios miembros del Gobierno regional se pronunciaron ayer en la Asamblea sobre la situación en que se encuentran los vecinos afectados por el ruido que generan las nuevas pistas del aeropuerto Madrid-Barajas.

En respuesta a una pregunta del diputado del PP David Pérez y ante un grupo de vecinos afectados,

el portavoz del Gobierno regional, Ignacio González, anunció que la Comunidad va a pedir a AENA "que sea especialmente escrupulosa en el cumplimiento", por parte de las compañías aéreas que operan en el aeropuerto, "de los horarios y las rutas establecidas", para que no se conviertan en un "elemento añadido a las posibles inconveniencias que se están produciendo y que afectan a los vecinos de las localidades cercanas". González fijó un plazo de un año para determinar la huella acústica definitiva.

La presidenta Esperanza Aguirre anunció la convocatoria de un reunión con los ayuntamientos, AENA y el Ministerio de Fomento para tratar de establecer medidas contra el ruido. Aguirre aseguró que la huella acústica aprobada en 2004 establecía que las medidas para paliar las molestias que ocasionara la ampliación del aeropuerto se fijarían un año después de la inauguración de la nueva terminal. Pero en esa reunión propondrá "no esperar un año y tomar medidas con mediciones reales de los ruidos en los tres primeros meses", a contar desde el pasado 5 de febrero, día de la inauguración de la terminal 4.

Aeronaves más ruidosas

La presidenta señaló que, mientras no se toman estas medidas, pedirá al Ministerio de Fomento que "garantice el efectivo cumplimiento de las trayectorias de vuelo, ya que hay muchos pilotos que no las cumplen; que obligue a las compañías aéreas a incorporar mecanismos de precisión para que los pilotos no se salgan de esas trayectorias; y que adopten medidas para prohibir el uso del aeropuerto a las aeronaves más ruidosas".

Tras renovar su compromiso de "no autorizar ni una sola recalificación urbanística" en el ámbito afectado por la ampliación, la presidenta subrayó que unos 800.000 vecinos sufren los ruidos de Barajas.

Según el portavoz socialista, Rafael Simancas, la mejor forma de solucionar esta situación es que la Comunidad acepte la propuesta de gestión conjunta del aeropuerto que hizo el presidente de Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el pasado día 5, durante la inauguración de la nueva terminal.

Simancas propuso también tres medidas que paliarían el problema de la contaminación acústica y de la huella sonora: la modificación del sistema de inspección y sanción para controlar las rutas aéreas; que la Comunidad destine recursos económicos para la insonorización de viviendas, y el establecimiento de "algún tipo" de restricción para los vuelos nocturnos.