Carta abierta a Felipe Alcaraz
Las declaraciones aparecidas en la prensa referidas a la Alcaldesa de Tomares, desde mi punto de vista, además de injuriosas, son hipócritas, demagogas y faltan a la verdad.
Le recuerdo, señor Alcaraz, que el origen de la "lucha sindical" de parte de CC OO en el Ayuntamiento es la amortización de dos plazas que no se consideraban necesarias. Amortización que fue aprobada con el voto favorable de IU, y después de haberlo considerado conveniente la ejecutiva local del PSOE y la de IU.
Lo democrático, señor Alcaraz, es ejercer los derechos de cada uno sin pisotear los derechos de los demás.
Tan legítimo es sumarse a una huelga convocada como no hacerlo, y no por ello están legitimados los huelguistas a insultar a sus compañeros ni a intimidar a los usuarios ni a amenazar a la policía.
Tan legítimo, señor Alcaraz, es desarrollar la actividad sindical como ejercer las funciones de los cargos para los que hemos sido elegidos por los ciudadanos. En democracia, señor Alcaraz, los límites del ejercicio de los derechos es el respeto a las leyes aprobadas por el Parlamento. Y si alguien cree que se han vulnerado sus derechos puede acudir a los Tribunales de Justicia.
Los componentes del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Tomares, antes formado por el Grupo Socialista y de Izquierda Unida, hemos recibido todo tipo de insultos, injurias, calumnias, falsas denuncias, provocaciones, y hasta ahora, sólo nos hemos defendido.
Le recuerdo, señor Alcaraz, que uno de los procedimientos por los han sido condenados miembros de CC OO se inició por una falsa denuncia contra un concejal por supuesta violación del derecho de huelga. No sólo no se estimó esa acusación, sino que el juez consideró que presuntamente habían cometido delitos en su actuación. Otro juez en un juicio con todas las garantías les ha condenado y ha dejado patente como han mentido en el acto de juicio algunos testigos de la defensa.
El procedimiento por el desalojo del pleno se inicia por una denuncia de los sindicalistas por "brutalidad policial" y ha quedado demostrado, en un juicio con todas las garantías, que eso era falso.
Estará conmigo, señor Alcaraz, que en democracia cada uno tiene su responsabilidad, sus derechos y sus obligaciones y que tanto en la acción política como en la acción sindical todo no vale. Usted está dando amparo a actuaciones delictivas.
Estoy a su disposición para aclararle cuanto necesite, no hace falta que nos amenace con que nos riñan desde arriba.
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