La delegación catalana defiende sus posiciones en el Congreso

Por vez primera en la reciente historia de la democracia española, una delegación de un Parlamento autónomo, el catalán, se ha incorporado al debate y negociación en el Congreso de los Diputados. Un total de 39 parlamentarios se han sumado a los trabajos de la Comisión Constitucional. De ellos, 11 son desde ayer miembros de la Ponencia que negociará el texto del nuevo Estatuto catalán. Sus portavoces resumieron ayer sus posiciones. Todos, menos el PP, defendieron el texto pactado y votado en el Parlamento de Cataluña. Y, de ellos, todos menos ERC defendieron también el acuerdo para modificar ese texto alcanzado el 21 de enero entre José Luis Rodríguez Zapatero y Artur Mas en La Moncloa. En síntesis, éstas fueron sus posiciones:

- Joan Saura (ICV). "Estamos ante un momento histórico, ante una oportunidad histórica", clamó Saura para defender la necesidad de reformar el actual Estatuto catalán, aprobado en 1979. Argumentó que cuatro partidos llevaban esa reforma en su programa para las elecciones catalanas y dio tres motivos para cambiarlo: "El Estatuto que tenemos es insuficiente"; "la legislación estatal ha vaciado de contenido las competencias catalanas", y "hace falta mejorar el encaje de Cataluña en el Estado español".

- Josep Piqué (PP). El portavoz popular resumió su rechazo en dos motivos: "El proyecto está en contra de la letra y el espíritu de la Constitución porque plantea una filosofía confederal, la existencia de varias naciones, la bilateralidad, el blindaje de competencias de Cataluña y la participación de la Generalitat en las decisiones del conjunto del Estado". El segundo motivo es que el proyecto es "muy intervencionista y prima al poder político".

- Josep Lluís Carod (ERC). El líder de Esquerra defendió la validez del texto aprobado en Cataluña y censuró el acuerdo entre Zapatero y Mas; se remontó a los años 30 y sentenció: "No vamos a dejar de ser lo que somos, una nación". Carod intercaló los "sentimientos de Cataluña" con la reclamación del sistema de financiación de las comunidades forales de País Vasco y Navarra. Advirtió a "la izquierda" de que "se juega la credibilidad de su discurso plural". Y afirmó que si no consiguen volver al texto catalán seguirán trabajando "pacíficamente" porque "sólo es derrotado quien desiste de luchar".

- Manuela de Madre (PSC). La diputada socialista arrancó su intervención con una crítica a la "descortesía" de Mariano Rajoy, por haber votado en contra de la admisión a trámite del proyecto catalán. Censuró la "campaña de manipulación y mentiras del PP". Dijo que el proyecto "no rompe España ni impone una lengua a nadie". Y concluyó que aprobarlo permitirá "una España verdaderamente grande y verdaderamente libre".