Del movimiento vecinal, a la política
Históricos líderes ciudadanos de Alicante impulsan una plataforma crítica con el PSPV para las elecciones de 2007
Una parte del movimiento vecinal de Alicante, tras una década de ostracismo a consecuencia de las sucesivas mayorías absolutas del PP y la escasa atención de las dos primeras fuerzas de la izquierda (PSPV y EU), lastradas por su división interna, ha irrumpido de lleno en la escena política de la capital alicantina. Abanderadas por José Luis Valdés, afiliado de CC OO y EU, una decena de significadas y reivindicativas voces de los barrios más deprimidos de la ciudad han constituido la plataforma política Vecinos por Alicante, con el objetivo de concurrir a las municipales de 2007. La nueva opción, hasta ahora "autosuficiente" en el plano de la financiación, dice contar unas semanas después con unos 300 afiliados.
La Plataforma surge por la "incoherencia" del PSPV en Rabassa y Mercalicante
Los socialistas auguran que apenas conseguirán "un puñado de votos"
La decisión de este grupo vecinal de implicarse en la vida política en primera persona ha dejado fríos a los dirigentes de las fuerzas políticas progresistas establecidas, a la espera de la cristalización de la nueva oferta política, sobre todo en el apartado del ideario político y los futuros apoyos económicos. Desde el PSPV, blanco de las críticas de la agrupación vecinal, se minimiza su efecto electoral. "Apenas lograrán un puñado de votos, que pueden acabar con la representatividad de EU", afirman al unísono diferentes líderes socialistas consultados. En las filas de la coalición de izquierdas, primitiva afiliación de los impulsores de Vecinos por Alicante, la nueva fuerza política es considerada "un error político" que obedece a "intereses personales y oportunistas" de sus líderes. Así lo aprecia el coordinador local de Esquerra Unida, José Fernández. El dirigente se pregunta cuáles serán las fuentes de financiación del partido emergente, una alternativa "sin duda aplaudida" por la derecha. Fernández tilda de oportunistas las declaraciones de los dirigentes vecinales que justifican su iniciativa en la desidia de los partidos de izquierdas: "Nosotros hemos denunciado asuntos como Rabassa y el urbanismo depredador del PP y hemos apoyado temas como el soterramiento de las vías. Pero tenemos la fuerza que tenemos. Ojalá fuéramos más".
Los más cómodos con la nueva oferta política son los líderes del PP, conscientes de que su inclusión en la carrera electoral no les perjudicará y, en cambio, sí restará votos a la izquierda.
El impulsor de Vecinos por Alicante, José Luis Valdés, acumula una constante activad pública desde la sección sindical CC OO en el aeropuerto de L?Altet, donde llegó a ocupar el cargo de jefe de de personal, bajo el mandato del PP en el Gobierno central. Valdés, además, abrió la vía judicial del caso Mercalicante -desfalco de unos 6 millones de euros- al denunciar en un juzgado en septiembre de 2002 al ex gerente de la empresa por apropiación indebida. El número dos de la organización recae en Pascual Pérez, portavoz de la Plataforma Renfe, entidad que reclama el enterramiento de las vía del tren a su paso por el casco urbano.
Valdés, explica que esta iniciativa es la "espontánea" repuesta de los ciudadanos a la "complicidad" que muestra el PSPV con la actual política del PP. La "incoherente" postura de los socialistas en el polémico Plan Rabassa y su "pasividad" en el caso Mercalicante constituyeron el "detonante" que empujó a los representantes vecinales a dar el salto político, según cuenta. Valdés rechaza que la nueva opción "merme" la representatividad final de las formaciones progresistas. A su entender, "la propia trayectoria" de estos partidos es la que ha "espantado" a su electorado. "El PP, por supuesto, no nos iba a sorprender porque ya conocemos cuál es su programa de engaño tras engaño. Pero ha sido la complicidad que están mostrando los socialistas con el PP y su desidia lo que nos ha llevado a esto. Si hubieran cumplido, jamás nos hubiésemos presentado", añade. Para Valdés, la principal crítica de la formación vecinal al equipo municipal del gobierno es la nula inversión en barrios. [Las barriadas del norte de Alicante están en franco deterioro urbanístico y social, con múltiples conflictos de convivencia y castigados por la delincuencia].
El dirigente vecinal resume la ideología de su organización en un lema: política social y justicia. "No tenemos ningún partido ni sindicato detrás. Afiliamos a la gente sin preguntar de dónde viene", asevera. La ejecutiva de Vecinos por Alicante está integrada por 16 personas "a título individual". Los constituyentes aportaron una "mínima" cantidad para gastos burocráticos. Su sede es un local cedido por unas horas por la Asociación de Vecinos de Ciudad de Asís. Según Valdés, los ingresos de Vecinos Por Alicante se limitan a la cuota mensual de tres euros que abona cada afiliado. "No tenemos ningún tipo de financiación externa", puntualiza.
