"Me duele que aún duden de mí"

Arqueó las cejas y movió los ojos hacia la izquierda. Unos 20 metros por detrás, Iván de la Peña asintió con la cabeza, acató las órdenes, y le puso el balón en la testa. Tamudo remató, marcó y lo celebró poco. Pero a su amigo Lo Pelat le susurró la frase habitual: "El gol es tuyo". La semana pasada ante el Málaga, la pareja Tamudo-De la Peña volvió a funcionar. Ha comenzado la segunda vuelta y, paralelamente, ha regresado el mejor Tamudo, el que define cara a puerta. Sabedor de que sus tantos le pueden valer un billete para el Mundial de Alemania, el capitán del Espanyol espera ratificar su buen momento -seis goles en las últimas seis jornadas- esta noche ante el Madrid.

Pregunta. ¿Por qué ofrece su mejor versión nada más rebasar el ecuador de la Liga?

"Ronaldo, en tan sólo unos pocos metros, es un 'kamikaze' imposible de detener"

Respuesta. No lo sé. Aunque simpre me preparo concienzudamente en la pretemporada y tengo confianza en mí mismo, simplemente ocurre. Pero es evidente que cuando el Espanyol está bien, Tamudo también está bien.

P. Este año ha celebrado algún gol con cierto enfado.

R. Marcar goles es la única forma que tengo de desahogarme, de sacar esa rabia contenida. Me duele que después de tantos años, parte de la afición y demás gente aún me pongan en duda. Entiendo que pueden opinar de todo y que yo sea el centro de atención. Pero lo que más me molesta es que se digan mentiras sobre mí. Es tan falso que estaba en contra de Lotina como que divido el vestuario. Creo que por llevar el brazalete me han pegado algún que otro palo de más.

P. ¿En el campo también? Todavía tiene un ojo morado por el golpe que sufrió ante el Málaga.

R. Sí, alguno que otro sí. Supongo que pocos delanteros reciben más patadas que yo, pero no puedo quejarme porque nunca me han entrado con maldad. A veces, además, invito a que me den. Ese es mi juego: el de luchar todas las pelotas, el de intentar dar lo mejor para que el día que no me entren los goles, mi esfuerzo sirva para otra cosa en favor del equipo.

P. ¿Siente que la hinchada le reconoce su esfuerzo?

R. Normalmente sí. Y siempre seguiré luchando por el equipo y por esta afición mientras haya un espectador que haya pagado la entrada por verme jugar.

P. El club ha traído a Pandiani en el mercado invernal. ¿Cómo le sienta la competencia?

R. Es un delantero más de la plantilla. Las alineaciones las decide el mister y si prefiere ponerle a él, pues que meta todos los goles que pueda porque eso le irá bien al Espanyol.

P. Da la sensación de ser una persona muy seria.

R. Sólo en el fútbol, en mi trabajo. Creo que así se debe ser. Los que me conocen saben que no lo soy. Como Iván [De la Peña], con quien siempre me lo paso genial dentro y fuera del campo. Ante el Málaga nos bastó hacer un gesto con los ojos para marcar el pase. Llevamos tres temporadas juntos y nos conocemos muy bien. Pero es que es muy fácil jugar con él detrás; da igual en qué posición y situación se encuentre porque te dará el pase perfecto. Cuando recibe la pelota debo poner los cinco sentidos. Al principio, aunque sabía de su calidad, me sorprendían bastante sus asistencias. Ahora ya no.

P. Ahora, incluso, se insultan en el campo.

R. Pero eso es porque tenemos confianza y porque Iván es de sangre caliente; siempre quiere ganar. Pero se nos pasa muy rápido.

P. Lotina suele elogiar la pareja que forma con De la Peña.

R. Creo que con el simple hecho de alinearnos juntos de partida fomenta la conexión. Pero el Espanyol, el equipo, somos todos.

P. Este año, en contra de lo que siempre sucede, apenas hubo rumores sobre su posible marcha.

R. Mejor. Estoy un poco harto de esos rumores. Llevo nueve temporadas jugando como titular en el Espanyol y nunca me ha dado pena el haber dedicado toda mi carrera a este club. Me siento orgulloso. Aunque siempre he dicho que si llega una buena oferta y el Espanyol lo desea, me voy.

P. ¿Como la del Glasgow Rangers en 2000?

R. La oferta era muy buena, pero el médico del club escocés pensó que mi rodilla no valía. Igual le pasó a Milito con el Madrid.

P. Esta noche, en el partido de Liga contra el Espanyol, vuelve Ronaldo.

R. Un delantero del Madrid siempre marcará muchos goles porque el equipo crea muchas oportunidades, pero Ronaldo, además, marca diferencias. Es un kamikaze que, en tan sólo unos pocos metros, es imposible de detener. No es lo mismo que juegue Baptista porque Ronaldo, además de convertirlo en más peligroso, da al Madrid mucha más profundidad.

P. Raúl empieza a entrenar y apunta al Mundial. ¿Es esa también su meta?

R. Seguro que Raúl no falla en la cita. En cuanto a mí, hay jugadores como Villa, Torres, Morientes o Luis García que también quieren ir. La competencia es muy grande y debo trabajar sobre el césped para ganarme un puesto. Este Mundial es mi última oportunidad porque no creo que a los 32 años llegue en plena forma. Ir a Alemania sería lo más grande. Igual también va De la Peña y, por eso de que el Espanyol no es considerado como un grande de la Liga, sería más bonito para todos.