_
_
_
_
Editorial:
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Montaña menos mágica

El Foro Económico Mundial celebrado en Davos, el pueblo donde Thomas Mann situó la acción de La montaña mágica, ha perdido parte de su magia. Por el número de asistentes, siempre creciente, sería difícil afirmar que está en crisis. Y sin embargo, lo está. Lo demuestra la ausencia de primeras espadas políticas de los países más ricos y poderosos, especialmente de Estados Unidos y Europa, excepto Angela Merkel. Incluso una región que debería interesar más, como América Latina, no ha estado representada por ningún presidente por primera vez en muchos años, una desidia que conviene rectificar por parte de los organizadores y de las capitales latinoamericanas.

Dos países han sabido utilizar bien en esta ocasión el encuentro. China e India han hecho su presentación alpina como grandes potencias del siglo XXI, una realidad que ya asoma en un horizonte cercano. El convidado de piedra ha sido Irán, cuya posición nuclear ha contaminado una parte demasiado importante de los debates. Y si los organizadores este año habían prestado poca atención a Oriente Próximo, la victoria de Hamás en las elecciones palestinas ha sido como una ducha fría que ha roto el optimismo comedido sobre el futuro económico.

Han faltado los temas sociales de fondo, impulsados más desde la filantropía de un Bill Gates o la ayuda de estrellas como Bono, Angelina Jolie o Michael Douglas que por los propios Gobiernos. Si quiere sobrevivir, Davos debe recuperar una mayor conciencia social y superior dedicación a la promoción de los derechos humanos. Google está dispuesto a aceptar la censura china para meter un pie en aquel país, y en Davos ha habido pocas críticas al respecto.

A la vez, la cita ha vuelto a sus orígenes: los verdaderos protagonistas han sido los creadores y los empresarios. Ni siquiera los expertos e intelectuales, que en esta ocasión no han aportado ideas o conceptos novedosos dignos de reseñar. El Foro Económico Mundial, promotor de la globalización por excelencia, puede acabar siendo víctima de su propio éxito, pues ahora, con los actuales medios de comunicación, empieza a ser menos necesario.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_