El Congreso rechaza que Zapatero comparezca por las críticas de militares

"En España no hay un problema militar; hay un problema del PP" por no "tener reflejos" para condenar las salidas de tono de algunos militares en las últimas semanas. Éste fue el argumento principal del portavoz socialista en la Comisión de Defensa del Congreso, Jesús Cuadrado, al oponerse a la petición del Grupo Popular que pretendía un pleno extraordinario y urgente en la Cámara para que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, explicase las declaraciones de algunos mandos del Ejército críticas con la reforma del Estatuto de Cataluña.

Hace 15 días, los populares pidieron que compareciese el ministro de Defensa, José Bono, para hablar del mismo asunto. En aquella ocasión, Coalición Canaria (CC) apoyó la propuesta, pero ayer el PP perdió a este socio ocasional, se quedó solo una vez más y su pretensión fue rechazada por 15 votos frente a 25.

Manuel Atencia, diputado popular, repitió los argumentos. Introdujo como novedad la carta de un capitán de la Legión, publicada en el diario Melilla Hoy, en la que declaraba que dudó sobre la conveniencia de desplazar a su compañía hasta Madrid para protestar. Atencia aseguró que el capitán utilizó "un lenguaje rechazable, lo que justifica plenamente su arresto". Quizás por eso negó con gestos en varias ocasiones las acusaciones de varios grupos que achacaron al PP no haber condenado con energía la indisciplina de determinados militares.

La estrella de la tarde fue el New York Times, blandido por unos y por otros, no sólo por su crítica hacia la actuación de estos militares, sino por el durísimo reproche que el periódico neoyorquino dirigió al PP en su editorial del martes pasado. Gaspar Llamazares (IV) subió el tono del ataque al PP. Citó el editorial, titulado Trogloditas en el Ejército español, y añadió que "troglodita es también" la petición del PP.

"Falta de reflejos"

Josu Erkoreka (PNV) defendió que la opinión de los militares "no puede ser referencia digna de tomarse en consideración por el Parlamento", lo cual no significa que no le preocupen las declaraciones conocidas, "y mucho".

Joan Puig (ERC) arremetió contra Bono, al que advirtió de que "a lo mejor está contento porque al final haya un Estatuto limpio de polvo y paja, pero si es así, el problema catalán seguirá existiendo". Cuadrado achacó al PP "falta de reflejos" al eludir una condena tajante de lo ocurrido, negó la existencia de un "problema militar", dijo incluso que es posible que algún medio extranjero se haya equivocado exagerando el problema, y concluyó: "Tenemos una democracia gobernante, no tutelada".