La despedida del embajador Banderas
El actor y director dice que Málaga es un "plató ideal" al acabar el rodaje de su segunda película
"Antonio, boquerón, con tu ayuda el Málaga va a la UEFA". Uno de los yonquis que habitualmente se estacionan en la plaza de la Merced se unió ayer -equipado con un móvil con cámara- a la comitiva de noventa redactores, fotógrafos y cámaras de televisión que cubrió la jornada de puertas abierta del rodaje de El camino de los ingleses, la segunda película como director de Antonio Banderas, basada en la novela homónima por la que Antonio Soler ganó el Premio Nadal en 2003. El rodaje del filme encara ya su semana final en Málaga antes de trasladarse a los estudios de la Ciudad de la Luz, en Alicante, y Banderas aprovechó la ocasión para despedirse de su ciudad natal y ejercer una vez más de primer embajador de la capital de la Costa del Sol.
"Málaga se ha convertido, y no sólo para mí, en un plató casi ideal: tiene la nieve en Granada a hora y cuarto, el desierto en Almería a dos horas, los bosques de la Serranía de Ronda, el mar y la montaña... Puede ser un plató magnífico", destaco Banderas en una conferencia de prensa, en la que estuvo acompañado por los actores Victoria Abril, Alberto Amarilla y María Ruiz y por el consejero de Turismo de la Junta de Andalucía, Paulino Plata.
La fe del yonqui en que Banderas puede rescatar al Málaga del descenso y llevarlo a jugar en Europa no está tan desencaminada. El actor y director malagueño ya ha obrado otro milagro: que Ayuntamiento y Junta, siempre tan peleados, colaboren en su película. Turismo aporta un millón de euros y el municipio, 300.000. Además de la cooperación institucional, Banderas agradeció la paciencia de sus convecinos ante las molestias del rodaje. El artista pidió disculpas especialmente por "el taco del día de la Inmaculada", cuando la filmación colapsó la principal arteria del centro de la ciudad, el Paseo del Parque.
Apenas a 100 metros de la casa en la que nació Pablo Picasso, el equipo de producción desplegó el material de rodaje ante la mirada periodistas y curiosos. Vestido con una cazadora de motero, Banderas daba instrucciones al director de fotografía, Xavi Giménez. El realizador aseguró que El camino de los ingleses, cuyo estreno se espera para octubre, será una película "muy visual y colorista" y que está "muy satisfecho" con lo que ha ido viendo en la sala de montaje que se ha hecho instalar en la habitación de al lado en el hotel. La película supone también el reencuentro con Victoria Abril después de 15 años sin trabajar juntos. La actriz, afónica "por rodar en invierno una película de verano", dijo que el papel que le ha encargado su paisano Antonio Banderas es un "bombonazo" interpretativo.
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