"Será una decisión de Camps si seguimos adelante o nos quedamos sin Estatut"

Joan Ignasi Pla, secretario general de los socialistas valencianos, ha dado otra vuelta de tuerca a la negociación de la reforma estatutaria. A 16 meses de las elecciones, el líder del PSPV-PSOE marca distancias con el PP y hace un guiño al resto de partidos de la izquierda.

Pregunta. ¿Por qué anuncia ahora su apoyo a la rebaja electoral y a la unidad lingüística cuando no lo pactaron en su día con el PP?

Respuesta. Siempre hemos defendido que el 3% fuese el límite para acceder al Parlamento y que el valenciano figurase en el título primero y en el artículo correspondiente tal cual estaba en el momento de la negociación. Teníamos dos opciones, avanzar o quedarnos, y hemos avanzado para hacer un mejor Estatut. Hemos incorporado todo un conjunto de modificaciones al texto de 1982, pero también hemos dicho que haríamos todo lo posible por sumar más gente al Estatut para que fuera de todos. Desde el día que el texto se tomó en consideración en las Cortes españolas dije que iba a buscar activamente ese consenso porque creía que los motivos que apartaban a muchos ciudadanos de este Estatut se podían superar y que ello no afectaba a la base esencial del texto. El PP lo considera además un Estatut excelente y por eso es un buen momento para decirle que estamos en disposición, desde la normalidad que supone aceptar las reglas del juego democrático, de hacer esos cambios. Será el PP quien decida si algo que considera excelente, con pequeñas modificaciones para integrar a más gente, es rechazable o no.

Si llegado el momento el PP no acepta, ¿votarán con otros partidos estos dos cambios en la reforma del Estatut?: "Si Izquierda Unida-Esquerra Unida no vota en contra, sí".

"En otros estatutos de autonomía no existe esa limitación del 5%, por tanto, tengo la total certeza de que el PSOE entiende nuestra posición"

P. ¿Por qué no insistieron más entonces?

R. Porque no hubiéramos avanzado y nos habríamos quedado con el Estatut de 1982. Los socialistas queremos un texto integrador y no excluyente. Y puede serlo. El único obstáculo es que el PP decida si excluye a una parte muy importante de gente o la integra con dos aspectos que no alteran la constitucionalidad del texto ni el modelo de España.

P. esquerra Unida ha acogido con cautela y cierto escepticismo su anuncio. Ponen en peligro su pacto con el PP mientras otras fuerzas políticas, partidarias de estos cambios, dudan de dar su apoyo.

R. No avancemos acontecimientos. Habrá que remitirse a las pruebas. Si bajamos el listón electoral, si eliminamos las reticencias de muchos sectores de la izquierda a la lengua, en el sentido de dejarlo como en 1982, con la referencia una vez al idioma valenciano y el resto alusiones sólo al valenciano, si eso supone que las formaciones políticas que votaron en contra del nuevo texto, puedan aceptarlo, nosotros cambiamos. Luego cada uno tendrá que asumir sus responsabilidades, pero estoy convencido de que es un paso más en esa idea de hacer en un estatuto integrador. El PP tendrá que decidir si mantiene el Estatuto o no. Izquierda Unida-Esquerra Unida, a su vez, tendrá que decidir si lo apoya. Nosotros estamos en una posición de equilibrio que es lo que necesita esta comunidad, menos posiciones cerradas y radicales y más diálogo y entendimiento.

P. ¿Ve algún margen de negociación con el PP?

R. Estoy convencido porque es muy difícil explicar a los valencianos y valencianas que se rechaza un Estatut por dos modificaciones que pueden hacer que gente que votó en contra ahora no lo haga. El portavoz del Consell ya ha salido en un tono fuera de lugar con respecto a nuestra posición y nos ha acusado de "giro catalanista", cuando lo único que estamos diciendo es que se respete la esencia de lo que el presidente Camps y yo pactamos en nuestra primera entrevista y es que las señas de identidad no se tocaban. Me da la impresión de que tienen una cierta posición de hipocresía.

P. Si llegado el momento el PP no acepta, ¿votarán con otros partidos estos dos cambios?

R. Si IU-EUPV no vota en contra, sí.

P. Eso será la ruptura definitiva del pacto estatutario.

R. Tendrá que decirlo el PP, porque el texto base que acordamos está ahí. Será una decisión de Camps si seguimos adelante o nos quedamos sin Estatut.

P. ¿Qué opina el PSOE de su anuncio? El pasado fin de semana el presidente del Gobierno le ponía de ejemplo por hacer posible la reforma con el PP.

R. El Grupo Parlamentario del PSOE siempre ha manifestado respeto hacia la posición del PSPV, tanto cuando presentamos el texto original como cuando presentamos las distintas enmiendas pactadas y también cuando hemos manifestado nuestra vocación de incorporar el 3%, que, por otro parte, es normal. En otros estatutos no existe esa limitación del 5%, por tanto, tengo la total certeza de que el PSOE entiende nuestra posición. Creo que lo que Zapatero y Blanco expresaron es una vocación de respaldo a una forma de hacer política, basada en el diálogo y la capacidad de entendimiento. Y del mismo modo que el presidente Zapatero me dijo que hiciese lo que estimase oportuno y fuese mejor para los valencianos, creo que ahora lo volverá a hacer. Hemos demostrado una vez más un talante y una forma de hacer política que no es habitual en el panorama político español, donde nos encontramos a diario con las salidas de tono y los anuncios catastrofistas por parte del PP. Zapatero lo que reforzó fue una manera de entender la oposición y ahora estoy convencido de que entenderá nuestros argumentos, al margen de que el presidente ya ha manifestado que rebajar los límites para mejorar la representatividad era lo más positivo.

P. ¿Tiene su gesto algo que ver con las dificultades que atraviesa la tramitación del Estatuto catalán como dice el PP?

R. Bueno, lo que pasa es que el PP, últimamente, y sobre todo su presidente, el señor Rajoy, se equivoca en casi todo. Llevamos mucho tiempo escuchando al señor Rajoy y al PP anunciando el apocalipsis y creemos se van a equivocar. El Estatut catalán lleva su camino y no tiene nada que ver con el Estatut valenciano.

P. Al día de hoy parece complicada una alianza electoral entre EU y el Bloc. Sin ella, ¿tiene el PSPV alguna posibilidad de gobernar la Generalitat en 2007?

R. Estoy convencido de que tengo las mismas posibilidades y voy hacer lo posible para que se concreten. El tiempo del PP se va agotando y la fortaleza por el cambio es cada día mayor. Quedan 16 meses y pueden pasar muchas cosas, pero creo que hay mucha gente que no cree en el engaño del PP, en la mentira masiva, mucha gente para quine la vida real no se parece a cómo la pintan los telediarios de Canal 9 ni a las palabras grandilocuentes de Camps. Lo que hagan otras fuerzas políticas es cosa de ellas. Es evidente que esta comunidad necesita un cambio profundo y el partido socialista está dispuesto a liderarlo.

P. Pero la aritmética no falla. Y ustedes necesitan de ellos para imponerse al PP.

R. Pues mire, las cosas cambian muy deprisa. El desgaste y la pérdida de credibilidad del PP se van a intensificar de una forma que ni ellos mismos esperan. La corrupción les hará mucho daño. Cada día está más claro que la impunidad con la que han gobernado se va acabando.

P. ¿Asistiremos a una judicialización de la vida política en estos 16 meses?

R. No se trata de judicializar la vida política. Se trata de que aquel que no ha cumplido con sus obligaciones en el cargo público que ha desempeñado, se someta a la ley. Y eso lo tienen que hacer los tribunales. Al margen de ello hay una responsabilidad política que ni el PP ni el señor Camps han sido capaces de asumir. Cada vez que Camps repite que confía plenamente en Fabra, une su destino político al de él. Teniendo en cuenta el nivel de descontrol, despilfarro y desorientación política, mientras Camps no asume ninguna responsabilidad, puede pasar de todo.

P. Los socialistas votarán contra el plan Rabassa en Alicante. ¿Les ha costado tomar la decisión?

R. El PSPV ha demostrado que en la política se pueden cometer errores y que rectificar siempre es bueno. Lo que no es bueno es que los políticos piensen que lo hacen todo bien, como hace el PP. Me parece muy acertada una decisión del grupo municipal que coincide con lo que nosotros planteábamos. Cuando el PSPV votó a favor de ese plan estoy convencido de que sus concejales pensaban que estaban haciéndolo bien, pero entre todos les hemos hecho ver que ésa no es la mejor posición para hacer de Alicante una ciudad sostenible.

P. Se ha tenido la dirección que emplear a fondo para convencer al grupo municipal de que se opusieran al plan Rabassa.

R. Ha habido argumentos suficientes, pero lo importante no es que nos hayamos empleado a fondo sino que al final los ciudadanos de Alicante perciban que la posición de los socialistas es ahora sólida aunque en un momento pudimos equivocarnos. Hemos escuchado a muchos colectivos y hemos entendido que teníamos que hacer caso a la ciudadanía.

P. Dio la sensación de que tuvo que ponerse serio con dirigentes como Blas Bernal o Ángel Franco.

R. Me tuve que poner serio para que todo el mundo supiese que era un camino sin retorno.

P. ¿Cómo van a impedir que se repitan nuevos casos Rabassa?

R. Si consiguiésemos que el urbanismo estuviera regido por reglas claras y transparentes, sería más sencillo, porque todo el mundo sabría que para planificar el futuro de sus pueblos y ciudades se tiene que revisar el Plan General de Ordenación Urbana. Se acabarían las reclasificaciones masivas de suelo permitidas, toleradas e incluso impulsadas por el propio Consell.

P. ¿La asamblea de Alicante será antes o después de elecciones?

R. No se ha tomado una decisión. La dirección atenderá los informes del presidente de la gestora, del secretario de Relaciones Institucionales y del secretario de Organización, y tomará una decisión.