La naturalidad de un maestro

El arquitecto Alejandro de la Sota (Pontevedra, 1913-Madrid, 1996) es uno de los nombres fundamentales de la arquitectura española del siglo XX. Una exposición recuerda en Sevilla su trayectoria. La muestra, que estará abierta en la sede de la Fundación Fidas (Pabellón de Finlandia, avenida de Marie Curie, s/n, Isla de la Cartuja) hasta el 10 de febrero, reúne fotografías, planos y maquetas del arquitecto.El horario de la muestra es de 10.00 a 14.00, de lunes a viernes. Y de 17.30 a 19.30, los martes y jueves. Junto a la Fundación Fidas, organizan la exposición el Colegio Oficial de Arquitectos de Sevilla y la Fundación Alejandro de la Sota.

El arquitecto dejó en sus 40 años de actividad obras maestras como el Gobierno Civil de Tarragona o el gimnasio del colegio Maravillas (Madrid). La medalla de oro de las Bellas Artes en 1986 y la medalla de oro de la Arquitectura en 1988 rubricaron una trayectoria que lo convirtió en maestro indiscutible de la arquitectura española de la segunda mitad del siglo XX.

"La figura de Alejandro de la Sota es un referente fundamental para la arquitectura española. Consideramos que ésta era una muy buena exposición para iniciar el programa de actividades de 2006 porque Alejandro de la Sota es el arquitecto español más destacado de la segunda mitad del siglo XX", comenta Carmen Rodríguez, coordinadora de la Fundación Fidas, que depende del Colegio Oficial de Arquitectos de Sevilla.

"Alejandro de la Sota abordó proyectos de muy distinta escala: desde un pueblo de colonización como Esquivel (Sevilla) a viviendas o edificios institucionales pasando por sillas y mesas. Su escala de proyectos es muy variada", agrega Rodríguez.

La exposición consta de 75 paneles fotográficos que resumen la obra de De la Sota, que fue el autor en Sevilla de un edificio de Aulas y Seminarios (actual Facultad de Matemáticas) y del proyecto del poblado agrícola de Esquivel, donde se preocupó de darle una escala humana que favoreciera la convivencia. El propio arquitecto afirmó que al abordar el proyecto de Esquivel, se propuso olvidar lo que sabía y aprender "de los que siempre hicieron los pueblos, y por cierto que los hicieron de maravilla: los albañiles y maestros de obras pueblerinos".

Titulado por la Escuela de Arquitectura de Madrid en 1941, De la Sota fue profesor en la misma, y dictó conferencias y clases en diversos centros, entre los que destacan la Architectural Association de Londres, la Escuela de Arquitectura de Múnich y la Universidad de Harvard.

De la Sota fue el responsable de los proyectos de importantes edificios de Madrid, como el Instituto Nacional de Colonización, la Dirección General de Correos y las sedes de Aviaco e Iberia.

Además de viviendas sociales en Santander, Salamanca y Pontevedra y diversas viviendas unifamiliares, el arquitecto gallego realizó el Gobierno Civil de Tarragona; la residencia infantil de Miraflores de la Sierra; la central lechera Clesa; el pabellón polideportivo de Pontevedra; el colegio mayor César Carlos de Madrid; el Centro de Cálculo para la Caja Postal de Madrid, y el edificio de Correos de León.

Sus obras han sido objeto de numerosas publicaciones. Hay varias monografías dedicadas a estudiar su arquitectura, que ha sido objeto de tesis doctorales en España, el Reino Unido, Alemania y Suiza.

De la Sota escribió en una ocasión: "En Arquitectura no se aprenden soluciones (...) Es necesario hacerse a uno mismo, prepararse profundamente para que en el momento de buscar soluciones salgan con naturalidad". De la Sota falleció a los 82 años mientras estudiaba unos planos. Tenía el encargo de ampliar el colegio Maravillas, donde había proyectado en 1961 el gimnasio, una de sus obras maestras, elogiada por el gran arquitecto Mies van der Rohe durante su viaje a Madrid en 1965.