El IRPF bajará una media del 6%
El tipo máximo se sitúa en el 43% y el mínimo en el 24% con un primer tramo a tipo cero
La reforma fiscal del actual Gobierno socialista empieza a tomar forma. El Consejo de Ministros aprobó ayer el anteproyecto de ley del impuesto sobre la renta y el de sociedades, más una inesperada subida del impuesto sobre el tabaco. El ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, calificó de "prudente" una reforma que a los contribuyentes les ahorrará más de 4.000 millones de euros a partes prácticamente iguales (los 2.000 millones de sociedades repartidos en cinco años).
La estrella de la reforma es el IRPF que declaran unos 16 millones de contribuyentes y representa la mitad de lo que recauda el Estado. Baja el tipo máximo (del 45% actual al 43%), suben los mínimos exentos y la deducción por rentas del trabajo y se crea un primer tramo a tipo cero. Todos los los rendimientos del ahorro, la otra gran novedad de la reforma, tributarán a un tipo único del 18% (el 15% hasta ahora para las plusvalías).
El ahorro medio estimado para los contribuyentes es de un 6%, aunque para el 60% de los contribuyentes de rentas más bajas la rebaja media es del 17%. En la parte alta de la tarifa puede haber algún perjudicado, según los cálculos de Hacienda. La intención de Hacienda es que todos mejoren con la reforma y que no aumente la presión fiscal durante los años de mandato socialista. Los principales aspectos de la reforma son los siguientes:
- Entrada en vigor. El nuevo impuesto sobre la renta entrará en vigor en enero de 2007 y se aplicará en las retenciones del trabajo desde enero del año que viene. La declaración-liquidación correspondiente se presentará en mayo de 2008. Desde ayer, el anteproyecto de ley está en la página web del Ministerio de Hacienda (www.meh.es) y durante tres semanas se someterá a información pública. A finales de enero se convocará un Consejo de Política Fiscal y Financiera para informar de la reforma a los consejeros de Hacienda de las comunidades autónomas. La razón es que el 33% del coste de la reforma recae en las arcas de las comunidades ya que éste es el porcentaje transferido. El Gobierno aprobará el proyecto de ley durante el mes de febrero. A partir de entonces, iniciará la tramitación parlamentaria, para lo que se abrirá la negociación con los socios parlamentarios.
- Tarifa. La tarifa del nuevo IRPF no sólo baja, sino que cambia de estructura, se modifican y elevan los tramos y también se suman los mínimos personales y familiares. De los cinco tramos anteriores se pasa a cuatro. El tipo más alto se reduce del 45% actual al 43% y se aplica a partir de 52.360 euros (antes, 46.818). El tipo más bajo se sitúa en el 24% (antes el 15%) aunque con la novedad de que se introduce un primer tramo a tipo cero. Ese tramo a tipo cero incluye lo que hasta ahora se conoce como mínimo personal y familiar.
Por ejemplo, un contribuyente con dos hijos que gana 17.360 euros al año, no pagaría nada por los 6.950 primeros euros (su minimo personal y familiar). Por el resto hasta los 17.360 euros paga un 24% (2.498 euros).
Con la tarifa actual, el contribuyente se descuenta el mínimo personal y familiar (4.850 euros). Sobre los 12.510 euros restantes paga el 15% por los primeros 4.162 y el 24% por el resto, lo que da una cuota de 2.627 euros.
Con la decisión de introducir el tramo a tipo cero, Hacienda intenta dar en parte respuesta al programa electoral socialista. Cuando el PSOE estaba en la oposición criticó el mínimo personal que introdujo el PP por regresivo. Al descontarse esa cantidad de la base del impuesto, el ahorro para el contribuyente es mayor cuanto más alta es su renta. Con la nueva fórmula del primer tramo de la tarifa a tipo cero, se incorpora progresividad al descuento del mínimo personal, aunque para ello, Hacienda ha tenido que elevar los tramos y los descuentos. La opción de llevar a la cuota del IRPF la deducción por hijo, tal como figura en el programa electoral socialista y en algún momento se barajó, ha sido descartada porque, según Hacienda, resulta menos clara.
- Mínimo personal y familiar. El nuevo impuesto sobre la renta sube el mínimo personal de 3.400 euros a 5.050 y también el de los hijos, hasta una cantidad entre 1.800 y 2.800 según el número. Estas cantidades tributan a tipo cero.
- Deducción por trabajo. La deducción que se aplican todos los que cobran de nómina se sitúa en 4.000 euros (ahora 3.500) para los que ganan menos de 9.000. Para quienes ganan más de 13.000, la deducción pasa de 2.400 euros a 2.600. En los tramos intermedios la reducción está entre estas dos cantidades y se calcula mediante una fórmula. En este caso, se trata de una deducción que se descuenta de la base del impuesto, igual que hasta ahora.
- Vivienda. La reforma aprobada ayer por el Gobierno deja prácticamente como está el actual sistema de deducciones, aunque con algunas expectativas fustradas. La deducción se mantiene en la cuota del impuesto y en el 15% sobre una base máxima de 9.015 euros que incluye el capital más los intereses. Se ha suprimido la ayuda que para quienes empiezan a pagar la hipoteca suponía la deducción del 25% para los primeros 4.507 millones de euros y del 20% para el resto hasta 9.015 durante los dos primeros años. Los contribuyentes que hayan comprado su casa antes del 20 de enero de 2006 mantiene esa ventaja fiscal si se encuentra en los dos primeros años del pago de la hipoteca.
Tampoco se ayuda al inquilino con una deducción que existió en las reformas fiscales de anteriores Gobiernos socialistas. Aunque desde Hacienda se había lanzado la idea de la deducción fiscal para los inquilinos, ha quedado finalmente descartada. Se mantienen, sin embargo, los incentivos fiscales a los propietarios y a las promotoras que se dediquen a la contrucción de viviendas en alquiler. Con el apoyo a la oferta, Hacienda considera que el inquilino también sale beneficiado.
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