Julio Bocca y Tamara Rojo bailan la música de Falla a ritmo de tango

"Soñaba con bailar con Julio Bocca", aseguró ayer la bailarina española Tamara Rojo, que actúa hoy con el bailarín argentino en el teatro Albéniz de Madrid. El montaje, en cartel desde hoy y hasta el próximo 29 de enero, reúne (junto a la compañía de Bocca: Ballet Argentino) a dos artistas que se encuentran en momentos muy diferentes de sus respectivas carreras.

Recién galardonada con el Príncipe de Asturias de las Artes junto a Maya Plisétskaya, Rojo (1974) se encuentra en la plenitud de su carrera, mientras que Bocca (1967) ha anunciado su retirada de los escenarios. Ambos bailares coincidieron en que actuar juntos era "un tema pendiente" que no se había materializado porque, según Bocca, "no habían encontrado un proyecto interesante y cuando aparecía no coincidían las fechas disponibles" de sus respectivas agendas.

El espectáculo lleva al escenario dos programas diferentes y de variado contenido cada uno. Por un lado, Don Quijote, del 17 al 22 de enero, con el clásico paso a dos; y el estreno de Tango brujo (del 24 al 29 de enero), una adaptación a ritmo de tango de la música de Manuel de Falla por el compositor argentino Leo Sujatovich. El repertorio del espectáculo se completa con las piezas El corsario, Manón y Cisne negro, además Ángeles sin alas, del húngaro Attila Eherházi; así como dos coreografías de Óscar Araiz, Adaggieto y Aquelarre, y dos creaciones de Balanchine: Tchaikowsky pas de deux y Allegro brillante.

La puesta en escena contempla también el estreno en Madrid de dos coreografías de Ana María Stekelman: Cruz y ficción, una pieza creada sobre el Ave María de Schubert y el tema Crucifixión, un negro espiritual, cantado por Marion Anderson. Los bailarines Cecilia Figaredo y Luis Ortigoza participan como invitados especiales.