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Reportaje:GESTIÓN Y FORMACIÓN

Directores responsables

El Instituto de Empresa crea un programa específico para formar directivos en responsabilidad social corporativa

Amaya Iríbar

El concepto de responsabilidad social corporativa está de moda desde hace años. No hay empresa que no se declare seguidora de él y muy pocas entre las más grandes que no hayan hecho un hueco en su organigrama a un responsable de esta área. El tirón ha llevado al Instituto de Empresa a crear un programa superior específico para ellos. La primera promoción está a punto de empezar.

Un estudio de 2003 aseguraba que el 30% de las grandes compañías españolas había creado una dirección específica de RSC
El curso consta de 172 horas de formación teórica y 22 encuentros con directivos que contarán su experiencia

El director de Responsabilidad Corporativa de una gran empresa se encarga de coordinar las distintas políticas de la compañía en aspectos tan diferentes como la reputación, el buen gobierno, la acción social o la estrategia medioambiental y de comunicarlas. Debe ser por tanto un gran conocedor de la organización, pero también un experto en la percepción que tienen de la firma los distintos grupos con los que ésta se relaciona, cada vez más numerosos: clientes, proveedores, accionistas, organizaciones no gubernamentales...

Esta figura empezó a aparecer en España en los años 2000 y 2001, después de que los escándalos corporativos en Estados Unidos cuestionaran la forma en que se gobiernan las grandes empresas cotizadas, cuya imagen quedó por los suelos. "A partir del año 2000 la responsabilidad social dejó de ser una moda y las grandes empresas empezaron a impulsarla", recuerda Joaquín Garralda, vicedecano del Instituto de Empresa y asesor académico de un nuevo programa de dirección en responsabilidad corporativa que empieza a finales de este mes.

Un estudio de la Fundación Empresa y Sociedad con datos de 2003 aseguraba que el 30% de las grandes compañías españ

El director de Responsabilidad Corporativa de una gran empresa se encarga de coordinar las distintas políticas de la compañía en aspectos tan diferentes como la reputación, el buen gobierno, la acción social o la estrategia medioambiental y de comunicarlas. Debe ser por tanto un gran conocedor de la organización, pero también un experto en la percepción que tienen de la firma los distintos grupos con los que ésta se relaciona, cada vez más numerosos: clientes, proveedores, accionistas, organizaciones no gubernamentales...

Esta figura empezó a aparecer en España en los años 2000 y 2001, después de que los escándalos corporativos en Estados Unidos cuestionaran la forma en que se gobiernan las grandes empresas cotizadas, cuya imagen quedó por los suelos. "A partir del año 2000 la responsabilidad social dejó de ser una moda y las grandes empresas empezaron a impulsarla", recuerda Joaquín Garralda, vicedecano del Instituto de Empresa y asesor académico de un nuevo programa de dirección en responsabilidad corporativa que empieza a finales de este mes.

Un estudio de la Fundación Empresa y Sociedad con datos de 2003 aseguraba que el 30% de las grandes compañías españolas contaba con una dirección específica de responsabilidad corporativa (RSC) o reputación. Es lo que ocurre en Telefónica, Siemens, Unión Fenosa, Vodafone o Red Eléctrica de España, por citar sólo unos cuantos ejemplos.

La RSC adquirió entidad propia dentro de la organización en algunos casos y en otros ampliando las funciones de directivos de otras áreas, como comunicación o de medio ambiente o acción social. El último estudio de la fundación no incluye ya este dato porque, aclaran fuentes de la misma, la figura del director de RSC "se ha extendido tanto que ya no es significativo. El 90% de las compañías del Ibex 35 lo tiene".

Lo que está cambiando es su peso, aseguran las mismas en la Fundación Empresa y Sociedad: "Ahora tiende a depender directamente del gabinete del presidente".

Con este panorama, avivado por la sucesión de seminarios, charlas, coloquios, cursos y mesas redondas sobre el tema, a los responsables del Instituto de Empresa (IE) se les ocurrió crear un programa específico para directivos de RSC. Un año después, y con la colaboración del Club de Excelencia en Sostenibilidad, que agrupa a 22 grandes compañías, y la Fundación Sagardoy, el curso estaba listo.

Talleres empresariales

El programa, que no es un máster, se desarrollará todos los martes, en sesiones de mañana y tarde, desde enero y hasta junio y consta de 172 horas de formación teórica que se completan con 22 horas más de talleres empresariales. Estos últimos consisten en encuentros con directivos de empresas que contarán su experiencia en este terreno. En estas sesiones especiales está prevista la participación de responsables de Adecco para hablar de integración laboral de colectivos con dificultades; de Siemens para analizar la innovación responsable; o de Telefónica Móviles para explicar cómo deben comunicar las empresas sus avances en RSC, por poner sólo algunos ejemplos.

Las sesiones teóricas son muy parecidas a las de cualquier Master en Dirección de Empresas -se recurre al método del caso y

El programa, que no es un máster, se desarrollará todos los martes, en sesiones de mañana y tarde, desde enero y hasta junio y consta de 172 horas de formación teórica que se completan con 22 horas más de talleres empresariales. Estos últimos consisten en encuentros con directivos de empresas que contarán su experiencia en este terreno. En estas sesiones especiales está prevista la participación de responsables de Adecco para hablar de integración laboral de colectivos con dificultades; de Siemens para analizar la innovación responsable; o de Telefónica Móviles para explicar cómo deben comunicar las empresas sus avances en RSC, por poner sólo algunos ejemplos.

Las sesiones teóricas son muy parecidas a las de cualquier Master en Dirección de Empresas -se recurre al método del caso y hay mucho trabajo en grupo- pero con contenidos específicos: relaciones con los grupos de interés, gestión de la RSC, desarrollo de capacidades directivas (negociación, liderazgo y gestión de equipos y técnicas de presentación). El programa tiene un precio de 9.800 euros.

El primer grupo de 25 alumnos ha sido seleccionado a través de una entrevista en la que se ha intentado detectar un interés especial por la responsabilidad social corporativa. Este curso "no es tan interesante para el que acaba de terminar la carrera, no es una oportunidad de trabajo, sino para alguien que ya trabaja en el departamento de RSC", reconoce Garralda.

Lo que no está tan claro es qué continuidad dará al programa la escuela de negocios madrileña. "En principio no creemos que haya mercado para hacerlo todos los años", reconoce el vicedecano del Instituto de Empresa. Además "en un par de años cualquier curso habrá incorporado los principios de la responsabilidad social corporativa a su programa".

Alumnos de la escuela de negocios madrileña Instituto de Empresa.
Alumnos de la escuela de negocios madrileña Instituto de Empresa.

Sobre la firma

Amaya Iríbar
Redactora jefa de Fin de Semana desde 2017. Antes estuvo al frente de la sección de Deportes y fue redactora de Sociedad y de Negocios. Está especializada en gimnasia y ha cubierto para EL PAÍS dos Juegos Olímpicos y varios europeos y mundiales de atletismo. Es licenciada en Ciencias Políticas y tiene el Máster de periodismo de EL PAÍS.

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