La imagen de mi barrio

El artículo que aparece en el suplemento de Domingo del 18 de diciembre sobre 'Los guetos en España' es un golpe bajo para los que vivimos y trabajamos en San Cristóbal de los Ángeles, barrio situado en el distrito de Villaverde. Si Villaverde está adquiriendo la fama de "lugar conflictivo, donde se concentran putas, delincuentes, cabecillas de bandas de crimen organizado, inmigrantes y camellos" es, en parte, gracias a la labor de periodistas como la autora de este artículo.

Si es cierto que hay una intención real de ayudar a que estos barrios no se conviertan en el escenario de violencias como las que se han experimentado en las banlieues (con "e" al final) francesas, lo primero que hay que hacer es ser responsable y tomar conciencia del poder del lenguaje, y de la facilidad con la que se crean etiquetas y estereotipos. No se puede dar a conocer un barrio, a través de un medio de comunicación tan relevante, asociándolo a aspectos tan negativos como la droga, la prostitución, el crimen organizado, las bandas callejeras, y, además, mezclar estos aspectos con la inmigración, como si se tratara de un problema más en la lista. Si a través de la labor periodística hubiera un interés real de ayudar a estas poblaciones a salir de la marginalidad, sus profesionales se darían cuenta de que este tipo de artículos, más que beneficiar a los habitantes de estos barrios, les perjudican enormemente. Y si quisieran aprender realmente de la experiencia france-

sa, sabrían que uno de los aspectos que más influyen en la discriminación es, precisamente, la estigmatización por su lugar de residencia.-