Liberada la alemana secuestrada en Irak

La arqueóloga alemana Susanne Osthoff, secuestrada hace más de tres semanas en Irak, fue puesta en libertad ayer, según informó su hermano en declaraciones a la cadena de noticias alemana N-TV. "Mi hermana está libre. Estamos muy contentos", dijo Robert Osthoff, que indicó que la arqueóloga se encontraba en la Embajada alemana en Bagdad y que su estado de salud era relativamente bueno.

Osthoff, de 43 años, que habla perfectamente árabe y se convirtió al islam hace muchos años, fue secuestrada, junto a su chófer, en el norte de Irak, el pasado 25 de noviembre. El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, informó de que el chófer, sin embargo, permanece aún en poder de sus captores, aunque aseguró que también será liberado pronto.

Otros cinco occidentales permanecen secuestrados. Se trata de un ingeniero francés, capturado el pasado día 5, y de cuatro cooperantes de la ONG Equipo de Cristianos Pacificadores: un canadiense, dos estadounidenses y un británico. El ultimátum dado por los secuestradores de este grupo expiró el pasado día 10, fecha en que fue asesinado un rehén egipcio.

Ayer, mientras tanto, una oleada de ataques y asesinatos selectivos segó la vida de 16 personas en distintas zonas del país. La mayoría de los atentados, dos de ellos suicidas, ocurrieron en Bagdad, donde el tráfico volvía a fluir con normalidad, después de suspenderse para garantizar el desarrollo de las elecciones del jueves. A primera hora de ayer, un conductor homicida al volante de un coche bomba acabó con la vida de un policía e hirió a otros dos. Poco después, una bomba colocada en un arcén mató a tres policías e hirió a otros dos en el oeste de Bagdad. En la misma zona, dos grupos de hombres armados mataron a tiros a un teniente coronel de la policía y a un funcionario del Ministerio del Interior. La misma suerte corrieron otro coronel de policía y su chófer en el sur de la capital y otras dos personas más en uno de los más pobres barrios chiíes.