El PP vota en las Cortes contra parte de la ley de acompañamiento que aprobó el Consell

El Grupo Popular de las Cortes Valencianas, incluidos los miembros del Consell que son diputados, votó ayer en bloque en contra de una parte del proyecto de ley de acompañamiento remitido por el propio Ejecutivo. Los populares rechazaron así la disposición transitoria cuarta de la ley, la que afecta a la Ley de Ordenación del Territorio (LOT), que el Consell intentó modificar, sin éxito, a través de una "corrección de errores" que suponía ampliar en dos años el alcance de una exención prevista en esa norma para la cesión de suelo protegido en los planes urbanísticos.

La semana pasada la Mesa de la Cámara acordó no tramitar esa fe de errores, aprobada por el Consell el pasado 2 de diciembre, porque el proyecto legislativo al que afectaba ya estaba en disposición de ser aprobado por el pleno, después de superar la fase de presentación de enmiendas y de debate en comisión. Y además, porque afectaba al fondo de la norma urbanística que pretendía modificar, a pesar de que el Consell consideró que se trataba de una cuestión "técnica".

A través de esa corrección el Consell pretendía que la obligación de los promotores de ceder suelo cuando un proyecto urbanístico incluya la reclasificación de suelo no entrara en vigor hasta el 2 de julio de 2006. La disposición transitoria original exoneraba sólo a los planes anteriores al 2 de julio de 2004, fecha de entrada en vigor de la LOT. Pese a ello, el Consell aseguró que era una equivocación y trató de modificar el texto como si se tratara de una enmienda técnica.

El reciente varapalo de la Comisión Europea a la Generalitat por la política urbanística desarrollada en los últimos años al amparo de la Ley Reguladora de la Actividad Urbanística (LRAU) presidió el debate de la ley de acompañamiento en las Cortes, de manera que apenas se habló de las medidas económicas que comporta un texto legal como ese. La oposición, que desde que el Consell planteó la "corrección de errores" la había denunciado como un intento de beneficiar a los promotores, aseguró que el Grupo Popular votó contra el Gobierno al que sustenta para parar el "gol" que el consejero de Territorio y Vivienda, Rafael Blasco, había intentado meter al presidente Camps.

El PP, por su parte, argumentó que su grupo había sido "muy coherente" al votar a favor "de un proyecto de ley que el Gobierno ha presentado y en contra de una disposición transitoria que el Gobierno ha dicho que no es correcta"."La ley de acompañamiento tiene malas compañías", dijo el portavoz adjunto de Esquerra Unida-L'Entesa, Joan Antoni Oltra, en su primera intervención en defensa de las enmiendas de su grupo a la ley de acompañamiento. Oltra acusó al PP de utilizar de forma "perversa" y de intentar "vaciar de contenido" el Parlamento, en referencia a la fe de errores. Por su parte, la portavoz socialista de Economía, Cristina Moreno, aprovechó su primer turno para referirse al polémico intento del Consell y explicó que todos los diputados del Parlamento valenciano deberían "felicitarse por que estas Cortes puedan ejercer libremente su facultad legislativa sin tener que soportar indecentes intromisiones por parte del Ejecutivo". El presidente de las Cortes, el popular Julio de España, invitó a la diputada socialista a circunscribirse a la defensa de sus enmiendas, pero Moreno continuó y, después de llamar "espabilado" al consejero de Territorio y Vivienda, Rafael Blasco -que asistía al debate desde su escaño-, por intentar "meter goles" al presidente de la Generalitat y al Consell, acusó al Ejecutivo valenciano de "denigrar el voto del PP, obligándole a votar un artículo que dice que tiene un error".

El portavoz adjunto popular Ricardo Costa replicó que la diputada socialista había intentado "equivocar a la opinión pública sobre una actuación correcta del Gobierno valenciano que respeta escrupulosamente la legalidad vigente" y aseguró que lo único que pretendían los socialistas era "desviar el debate" para "tapar sus vergüenzas". Se refería a la reciente resolución de la Comisión Europea que, en opinión de los populares, "acaba de finiquitar el modelo depredador de [Eugenio] Burriel", actual secretario de Territorio y Vivienda del PSPV-PSOE y consejero Obras Públicas de la Generalitat en 1994, cuando se aprobó la LRAU. Una ley que el PP, que asumió el poder en la Generalitat en el año 1995, ha aplicado desde entonces pero sin desarrollarla y sin corregirla para solucionar los numerosos problemas que ha generado en estos 10 años. Costa criticó a los socialistas por votar en contra de la que calificó como la "medida más proteccionista con el medio ambiente de la historia" de la Comunidad Valenciana.

Al final no hubo fuga de votos populares, que era una posibilidad con la que se había especulado en los últimos días, dado que algunos diputados del Grupo Popular habían mostrado abiertamente su malestar por la forma de actuar del Consell y, en especial, por la gestión de Blasco. El PP votó a favor del artículo 114 de la ley de acompañamiento, el referido a la modificación de la LOT, mientras que el PSPV votó en contra y EU-L'Entesa se abstuvo. Ese artículo supone que todos los Ayuntamientos que aprueben reclasificaciones de suelo no urbanizable para convertirlo en urbanizable tienen la obligación de ceder la misma cantidad de suelo protegido. Pero el PP votó en contra de la disposición transitoria cuarta, que establecía la exención de esa obligación para todos los proyectos urbanísticos que hubieran sido sometidos al público antes del 2 de julio de 2004, fecha en que entró en vigor la LOT. Era la disposición que el Consell intentó corregir para que la exención alcanzara hasta el 2 de julio de 2006.

Al rechazar la transitoria referida al 2 de julio de 2004, la obligación de los promotores de ceder suelo cuando un proyecto conlleve la reclasificación de suelo no urbanizable será aplicable en cuanto entre en vigor la ley de acompañamiento, el próximo 1 de enero de 2006. Los promotores ven reducido así en seis meses el plazo que pretendía darles Blasco para no tener que cumplir esa obligación.

El Consell ha justificado el cambio de la LOT porque esta establecía la obligación de ceder terrenos sólo para los proyectos que superaran los 0,35 metros cuadrados de techo por cada metro cuadrado de suelo. Un tope que el consejero Rafael Blasco incluyó en la ley -a modo de coartada, según los socialistas- pero que ha sido burlado de manera sistemática porque muchos proyectos urbanísticos presentados y aprobados desde entonces se han quedado de forma deliberada justo por debajo, para no tener que ceder nada. El diputado verde de EU-L'Entesa Carles Arnal lo explicó así: planteó que la modificación de la LOT establecida en la ley de acompañamiento "no es más que una trampa para dorar la píldora y edulcorar las reclasificaciones masivas de suelo no urbanizable efectuadas al margen de los planes generales".