Cita en Pozuelo con el mejor cine de animación

El Festival Internacional de Imagen Animada, Animadrid (www.animadrid.com), comienza hoy en Pozuelo de Alarcón y se desarrollará hasta el 2 de diciembre, con un programa que apuesta por el mejor cine de animación. Este año, rinde homenaje al maestro italiano Guido Manuli y a la pareja de animadores catalanes Baca y Garriga, asimismo, en la jornada de apertura se estrenará el largometraje How'l moving castle, la nueva producción de Hayao Miyazaki, creador de La princesa Mononoke y El viaje de Chihiro. Además, Jordi Grangel, uno de los creadores de los personajes de La novia cadáver, la última película de Tim Burton, dará hoy una conferencia.

La programación se divide en tres grandes bloques. Por una parte, se desarrolla la Sección Oficial, en la que compiten cortometrajes, largometrajes y programas de televisión internacionales. Aquí se podrán ver los trabajos de autores consagrados como Bill Plympton o Juan Padrón, junto a los de jóvenes promesas.

Otro de los bloques se denomina Secciones Informativas. Este apartado incluye recientes éxitos de taquilla como Los Increíbles o Wallace & Gromitt: la maldición de las verduras, y también cine de animación de autor, normalmente de más difícil acceso. En esta sección el festival ofrece conocer el trabajo de destacados realizadores como el italiano Guido Manuli y los catalanes Baca y Garriga.

Las actividades paralelas desarrollan una variada oferta de talleres, conferencias, exposiciones, presentaciones y un maratón de cine en 3D durante 24 horas. El país invitado de esta edición es Polonia. Se mostrarán obras de realizadores polacos experimentales y cercanos al absurdo como Jan Lenica o Walerian Borowczyk y de otros artistas más tradicionales como Zenon Wasilewsky o Bronislaw Zeman.

Cortometrajes

En Animadrid 2005 se verá también una retrospectiva de los Oscar de animación, que permitirá disfrutar de cortometrajes ganadores del premio Oscar desde 1962 hasta 1988. Para los más pequeños el festival ha preparado un ciclo con títulos clásicos y contemporáneos, y proyecciones de películas en las salas Kinépolis.

Los organizadores de Animadrid definen el festival como un lugar de encuentro que busca desterrar el tópico de que el cine de animación es sólo para niños. "Es un foro de reunión para que los profesionales debatan el trasfondo del género e intercambiar experiencias, y para que los espectadores conozcan mejor su trabajo", explican.