El patinaje internacional rechaza por mayoría la admisión de Cataluña

La asamblea de la Federación Internacional de Patinaje (FIRS) rechazó ayer en Roma por amplia mayoría la admisión de la Federación Catalana para poder competir oficialmente y al margen de España. Los delegados de los 67 países reunidos en la sesión emitieron 168 votos en secreto: 125 votaron en contra de la incorporación de Cataluña y 43 a favor. El representante de Hungría se abstuvo. La delegación catalana acogió con resignación su segunda derrota en un año (la primera fue en Fresno), pero avisó de que estudia nuevas vías para alcanzar sus objetivos.

"Somos demócratas y hay que aceptar la decisión de la mayoría. El hockey debe decidir ahira si quiere seguir o no con este proceso. Pero hay otras 47 federaciones que persiguen también su reconocimiento", dijo cariacontecido Rafel Niubó, secretario de deportes de la Generalitat. El congreso duró cuatro horas y se celebró en el Complesso dei Dioscuri, en pleno centro de Roma. Esta vez, la sesión se celebró con transparencia y cumplió los requisitos que le había sugerido el Tribunal del Arbitraje del Deporte (TAS), que en julio dictó una sentencia instando a la FIRS a corregir las irregularidades habidas hace un año en la asamblea de Fresno, donde los dirigentes catalanes no pudieron tomar la palabra y se votó a mano alzada con este resultado: 114 votos en contra, ocho a favor y dos abstenciones.

Ayer, Ramon Basiana, presidente de la Catalana, leyó un discurso de 14 minutos y el voto, gracias a una pequeña cabina situada en el escenario, fue secreto. "No tenemos nada que esconder", dijo el italiano Sabatino Aracu, presidente de la FIRS, diputado de Forza Italia y partidario de rechazar la petición de Cataluña. Aracu advirtió de que la hipotética admisión supondría un "obstáculo" para el futuro de este deporte en su aspiración a ser olímpico. "Todo el mundo podría pedir lo mismo como las 20 provincias de Italia. Si en España sólo hay un comité olímpico, no puede haber otra federación con otro".

Deporte y política

Basiana leyó en castellano, idioma oficial de la FIRS junto al francés, un escrito de cinco folios, que fue repartido entre los delegados y traducido a una decena de idiomas. Su estrategia fue la de desvincular el reconocimiento del hockey de la política y destacó la tradición de este deporte en Cataluña, su contribución al patinaje mundial, su ayuda a las pequeñas federaciones y a la propia FIRS (la ha subvencionado este año con 50.000 dólares frente a los 34.000 que le ha donado el Consejo Superior de Deportes). Basiana insistió en que su informe se ajusta a los estatutos y que existen 47 países como Cataluña sin Estado que integran federaciones internacionales. "¿De qué tienen miedo? ¿Es que hay otra federación de hockey con esta tradición con todo un país detrás?", se preguntó.

Aracu concedió la réplica a Carmelo Paniagua, presidente de la Federación Española, y ésta fue demoledora. Subió a la tarima y con voz firme espetó: "¿Me podría enseñar el presidente de la Catalana su pasaporte? ¿Con cuál se ha acreditado hoy? Se lo voy a enseñar", dijo exhibiendo el suyo. "Es como éste y pone España, y con este documento han viajado por todo el mundo pidiendo el voto para Cataluña". En un tono duro, Paniagua recordó que el artículo 3 de los Estatutos de la FIRS indican que sólo puede haber una federación por país y que la Carta Olímpica sólo admite estados independientes reconocidos por la comunidad internacional. Aseguró que la delegación catalana se ha dedicado a ayudar más a federaciones extranjeras en busca de votos que a sus propios jugadores. "Nos dicen que están hartos de todo esto", afirmó. "Si esto se aprueba seremos el hazmerreír".

Varios delegados tomaron la palabra. Los de Georgia, Armenia, Nigeria y Togo apoyaron a Cataluña y los de Suecia y Puerto Rico se pronunciaron en contra. La votación fue tan lenta como definitiva. Se debía votar si se estaba a favor de la tesis de la FIRS (contraria al ingreso) o en contra. Una veintena de países, potencias en este deporte, reunían un centenar de votos y se alinearon con la tesis oficial. Sólo apoyaron a Cataluña, Japón, México, Chile, Inglaterra y otros países pequeños. "Espero que este partido ya se haya acabado del todo", dijo Angel Luis López de la Fuente, subdirector del CSD.