CiU y el PP critican el aumento de barracones en las escuelas y dudan que se contrate a 6.000 maestros

Los presupuestos catalanes de 2006 prevén la creación de 6.035 puestos de trabajo para docentes. Pero tanto CiU como el PP expresaron ayer sus dudas acerca de la cifra final de contrataciones del Departamento de Educación y exigieron "más transparencia" al Ejecutivo autónomo. La oposición, además, criticó con dureza el aumento del número de los barracones en las escuelas. El Gobierno, por su parte, alegó que, ante el fuerte crecimiento de la escolarización de alumnos, "las escuelas no se construyen en dos años". Al margen del debate acerca de Educación, la oposición puso el acento en que las discrepancias entre los partidos que forman el Ejecutivo catalán dificultan la acción de gobierno. En una sesión maratoniana en el Parlament, el tripartito rechazó las enmiendas a la totalidad a las secciones presupuestarias relativas a los distintos departamentos.

La diputada de CiU Irene Rigau denunció "incumplimientos" de los compromisos del tripartito, como el relativo a la reducción del número de barracones en centros escolares. Rigau, además, se preguntó si los 6.000 nuevos maestros que anuncian los presupuestos incluyen "las jubilaciones, las cuotas de sustituciones, las regularizaciones de determinadas contrataciones y los compromisos de estabilidad", o si este contingente se destinará "a la sexta hora" de docencia. Rafael López (PP) aseguró que el incremento "más ajustado a la verdad" se ceñiría a unos 2.000 docentes. El Ejecutivo catalán, a través de Josep Maria Freixanet, se limitó a asegurar que la previsión de 6.000 nuevas plazas para docentes supone una cifra "nunca vista" en el pasado.

En cuanto a Sanidad, CiU y el PP aseguraron que las discrepancias en el seno del tripartito "dificultan la ejecución de las políticas de este departamento", según Francesc Sancho (CiU). El diputado del PP Joan López denunció que la reducción de las listas de espera, la creación de la Agencia de la Dependencia, la reforma del Instituto Catalán de la Salud (ICS) y la reducción del gasto farmacéutico son los principales "objetivos incumplidos" por el Gobierno. En los bancos del Gobierno, la diputada socialista Carme Valls afirmó que Cataluña es la comunidad "con menos déficit en gasto farmacéutico" y destacó las inversiones en construcción de infraestructuras hospitalarias.

- Trabajo e Industria. La oposición denunció el "declive industrial" de Cataluña, donde el sector crece al 1%, dos puntos por debajo del PIB. Oriol Pujol (CiU) acusó al tripartito de "renunciar" a más de 140 millones destinados a formación continua " a pesar de las cinco sentencias favorables del Tribunal Constitucional".

- Interior. CiU y el PP criticaron que el presupuesto presentado repite inversiones de cuentas públicas anteriores y desatiende el Servicio Catalán de Tráfico (SCT), dedicado a la prevención de accidentes. La diputada nacionalista Núria de Gispert, además, se quejó del retraso en el despliegue de los Mossos d'Esquadra. El socialista David Pérez reiteró el compromiso de que el despliegue de la policía autonómica finalizará en 2008.

- Justicia. Elena Ribera, de CiU, denunció la supuesta ineficacia del departamento y aseguró que la federación "hará todo lo que no está haciendo" el actual Ejecutivo, después de "este paréntesis del tripartito". El diputado del PP Jordi Montanya consideró "bueno" que crezca el presupuesto, aunque ironizó sobre la falta de recursos.

"Tal como está la Administración de justicia", dijo, "sólo faltaría que no tuviera dotación". Montanya se quejó del centralismo de las cuentas, dirigidas, sobre todo, "al área metropolitana de Barcelona". El tripartito reconoció que la partida presupuestaria para Justicia es "pequeña", pero definió estas cuentas como "las mejores de los últimos 25 años".