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Reportaje:

Leer el 'Quijote' entero por 642 euros

Una asociación pagará a un taxista por la lectura completa del libro de Cervantes ante una cámara 'web' conectada a Internet

El taxista Javier Carretero, de 35 años, ha cambiado por unos días las calles colapsadas de Madrid y su coche marca Skoda Octavia por una Mancha imaginaria, poblada por gigantes, castillos y doncellas de cuento. Desde ayer, el Quijote ocupa ocho horas de su jornada, así que dedicará los fines de semana a trajinar con su taxi para seguir ganándose la vida. Javier se enfrenta al reto de leer la obra legendaria de Cervantes en el Colegio del Rey, en Alcalá de Henares, y frente a un objetivo que le vigila. A cambio, le pagarán 642 euros, la cifra que él mismo propuso al participar en la convocatoria Dinero para Leer. Los miembros del grupo creativo y de iniciativas sociales mmmm..., en colaboración con el Instituto Cervantes, tentaron a los internautas con un homenaje atípico a Don Quijote de la Mancha: una beca para leer el libro delante de una cámara web y, de epílogo diario, un examen a través del chat para comprobar si el becado estuvo atento a las cuitas del caballero andante.

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Había un máximo de sueldo posible, 1.000 euros, pero todos los aspirantes que optaron leer el Quijote por esa cantidad quedaron fuera de la competición automáticamente. "Buscábamos las peticiones más sinceras, a la gente que presentaba motivos auténticos por los que leer este libro", explica Eva Salmerón, una de los integrantes de mmmm.... De las 181 inscripciones en la web www.dineroparaleer.com, las de los estudiantes tampoco lograron salvarse de la criba. "Se presupone que los estudiantes tienen mucho más tiempo para leer que el resto de personas y nosotros al fin y al cabo compramos tiempo". Tras un estudio pormenorizado de la situación económica de los finalistas, su oficio y los motivos por los que estaban dispuestos a soportar ocho horas diarias delante de un libro de más de mil páginas, los miembros del grupo impulsor de la idea eligieron 30 peticiones. "Llamamos por teléfono a los seleccionados pero unos confesaron que sólo habían echado su solicitud por curiosidad y otros eran de fuera de Madrid y no disponían de medios económicos para pagarse la estancia durante la beca; con los 200 euros que nosotros cedemos para transporte y manutención no les llegaba. Había incluso un marino mercante que nos interesaba mucho pero cuando tratamos de contactar con él se había cambiado de casa", añade Salmerón.

Después de varias semanas de tanteo y tachones en la lista, decidieron entrevistar a tres personas. Y entonces, Javier les cautivó. "Me llevé las fotos de mi boda y les enseñé que el libro de ceremonias fue Don Quijote de la Mancha y que mis compañeros taxistas fueron vestidos como los caballeros de la banda roja", comentó ayer el propio becado, tras la primera sesión de lectura. "Siempre quise leer esa historia pero nunca tengo tiempo, creo que si Don Quijote viviera en el siglo XXI sería taxista", apuntó Carretero. Todas estas referencias vitales a la obra de Cervantes y el oficio de Javier, "que es muy esclavo y apenas le deja tiempo para leer", según Salmerón, sacaron de dudas a los integrantes del grupo creativo. "Sobre todo nos contagió su entusiasmo por empezar cuanto antes", agrega. Ese furor continuaba aún ayer que fue el día del estreno. "Esto es tal y como me lo imaginaba, quizá yo mejoraría la silla", bromeó el taxista de Getafe. "He leído los primeros 10 capítulos, o sea, los que todo el mundo conoce, así que no me preocupan las preguntas del chat", comentó minutos antes de someterse al examen cibernético. En cuanto a la dotación económica de la beca, bromeó: "642 euros vienen un poco justos para mantener la casa y a la familia así que trabajaré en el tiempo que me deje libre Don Quijote, sobre todo los fines de semana. Hay quien se va de vacaciones al Caribe y yo esto me lo tomo como vacaciones en La Mancha", sonrió.

Por si Javier falla, la organización ha previsto dos posibles sustitutos. Ésa es la única excepción prevista, porque el resto de condiciones de la beca es estricto y claro. "El becado debe leerse el libro íntegro, cumpliendo un horario de nueve de la mañana a dos de la tarde y otra vez desde las tres a las seis, estará frente a una cámara web que retransmite en todo el momento el proceso de lectura, y a las 17.30 el examen a través de un chat (http://www.dineroparaleer.com) en el que quien lo desee puede participar", organiza Eva.

Esta iniciativa forma parte del conjunto de propuestas que el Instituto Cervantes ha brindado durante todo el año dentro del proyecto de arte en la red Palabras Corrientes. "A nosotros nos costó mucho encontrar una idea que combinase Internet con el lenguaje pero al final pensamos que el ritmo frenético de la gente impide leer nada y mucho menos un libro de más de mil páginas así que decidimos, por un lado, comprar el tiempo de las personas, y, aprovechando el cuarto centenario del Quijote, pues que tuvieran que leer esa obra", apunta esta fundadora de mmmm...

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Este grupo creativo es autor de proyectos sociales de estilos muy variados. Este año montaron un cóctel para 100 personas ciegas y videntes en un espacio a oscuras en La Casa Encendida. En la fiesta sólo se oyeron gritos, ni siquiera la música, que era el objetivo de mmmm..., "demostrar que la gente cuando no ve cree que hablando más alto se entiende mejor". Otras iniciativas de este colectivo creativo son Telemadre o la excursión que en 2003 un grupo de ancianos hizo al festival de música independiente, Festimad.

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