"No iba a ser cómplice de corrupción"

Esperanza Ruiz, concejal independiente del Ayuntamiento de Gibraleón (Huelva), ex edil del PP, presentó el pasado 14 de noviembre, junto a ocho concejales del PSOE, ahora también independientes, una moción de censura para desbancar de la alcaldía al popular José Ramón Gómez Cueli. Su marcha como concejal en marzo pasado dejó al equipo de Gobierno (PP) en minoría. Esta situación desencadenó la crisis en ese Ayuntamiento. Esperanza Ruiz comparte con los ex ediles socialistas una común aspiración: Acabar con la situación de "paralización y de corrupción urbanística" en la que el PP ha sumido a esa localidad, según argumenta.

Pregunta. Le acusan de ser la promotora de la crisis en el Ayuntamiento de Gibraleón, tras su marcha como edil del Partido Popular

Respuesta. Me fui porque había un proyecto con el que no me sentía identificada, que tenía indicios de especulación urbanística y de corrupción, y no iba a ser cómplice de ello. Mi salida del PP se ha debido a que se desvirtuó el plan que nos habíamos marcado todo un equipo en un primer momento.

P. ¿Se considera usted una tránsfuga?

R. Creo que habría que revisar la palabra tránsfuga. Me molesta que se le atribuya un concepto peyorativo. En realidad, se han dado casos de personas que han sido calificadas como tránsfugas, cuando lo único que han hecho es salir del lugar que no les gustaba y denunciar situaciones de corrupción. Hay que revisar ese término. Pienso en Inmaculada Larrañaga o en otros concejales que se han marchado de sus partidos precisamente para no ser partícipes de esa corrupción urbanística y de negocios personales. Si a las personas que de verdad anteponen los intereses de los ciudadanos y la defensa de sus pueblos por encima de los intereses políticos se les llama tránsfugas, vivan los tránsfugas.

P. ¿Le duele el calificativo?

R. No me siento tránsfuga para nada. Tomé una decisión en un momento determinado que resultó dolorosa, pero de la que me siento orgullosa. Lo único que he hecho es decir hasta aquí he llegado con una serie de corrupciones y no quiero ser cómplice de esta situación.

P. ¿Por qué se ha llegado a esta situación de crispación en Gibraelón?

R. Este pueblo es inteligente y tiene las ideas muy claras. El pueblo está de enhorabuena porque va a conformarse un gobierno que va a traer la estabilidad a la localidad. Los vecinos están respondiendo con tranquilidad y con calma a esta iniciativa, lo que ocurre es que los líderes del PP están alentando a la crispación y al desorden público. La opinión pública está con la moción de censura, conoce perfectamente qué hay detrás de todo esto. El PP ha promovido mociones de censura en otras ciudades como Bormujos, San Roque o Ronda. Por qué se levanta tanto ruido con la moción de censura de Gibraleón, que además es una fórmula legítima para casos como éste. Quizás habría que mirar en los negocios turbios que hay detrás de quienes se oponen a ello.

P. ¿Tan preocupante son los casos de corrupción urbanística para presentar la moción?

R. Existen indicios claros de que el alcalde de Gibraleón, José Ramón Gómez Cueli, había instalado al Ayuntamiento en una situación de corrupción urbanística. Se le ha pedido en reiteradas ocasiones que aclarara una serie de operaciones de dudosa legalidad y ha hecho caso omiso. La paralización en la que este señor ha sometido al pueblo, por un lado, y la especulación urbanística, por otro, han sido razones más que suficientes para presentar nuestra iniciativa, que es una solución a la crisis que el PP ha generado en el municipio.