Todos los grupos menos el PP votan crear una ponencia para la reforma del Senado

El PSOE logró ayer consolidar en el Senado el grupo compacto de apoyo que más se ha repetido a lo largo de la legislatura: todos los grupos, salvo el PP, aprobaron una decena de proposiciones transaccionales, fruto del debate sobre el Estado de las autonomías, entre las que se incluye la creación de una ponencia para promover la reforma de la Cámara alta.

Hasta última hora de la tarde, socialistas y populares negociaron en torno a una propuesta de acuerdo sobre las reformas estatutarias, el consenso necesario para realizarlas y la reforma de la financiación autonómica. El acuerdo no fue posible porque el PSOE no aceptaba dos términos exigidos por el PP: por una parte, el "doble consenso" del que habla el portavoz popular, Pío García Escudero; esto es, la exigencia de que el Estatuto catalán requiera no sólo el apoyo del Parlamento autónomo, sino también el pacto entre los dos grandes partidos en Congreso.

Por otra parte, el término "multilateralidad" aplicado a la reforma del sistema de financiación autonómica, que para el PSOE implicaba conceder derecho de veto sobre esta modificación a cualquier autonomía, según explicó su portavoz, Joan Lerma.

Abandonada la posibilidad de un pacto con el PP, el PSOE se concentró en los demás grupos. De hecho, sólo salieron aprobadas las mociones acordadas por todos los demás, ya que los 125 senadores del PP, a sólo cinco de la mayoría absoluta, hacen casi imprescindible la construcción de un bloque con todos los demás. Los populares no lograron aprobar ninguna de las suyas.

Precisamente, por la necesidad de consensuar un acuerdo de todos los demás, el PSOE tuvo que reducir mucho el contenido de las mociones. La única realmente relevante es la que marca la creación de una ponencia en el seno de la Comisión General de Comunidades Autónomas para estudiar la reforma del Senado, en la que participarán los representantes de las autonomías. Se añade como objetivo la posibilidad de usar las lenguas cooficiales en todas las sesiones del Senado. El PP votó en contra, de manera que esta reforma de la Cámara se antoja compleja porque para aprobarla, con la modificación de la Constitución que implicaría, el PP es imprescindible.

El PSOE también pactó con sus socios un texto genérico sobre la reforma de la financiación, que deberá contemplar "la evolución de la población y garantizar la máxima equidad financiera en aquellos servicios básicos que definen la cohesión social y territorial de España, como son la sanidad, la educación y la desigualdad social, compensando el sobrecoste de la insularidad y la lejanía".

[El socialista Víctor Manuel Urrutia tomó ayer posesión de su acta de senador designado por el Parlamento vasco, en sustitución de la popular Ascensión Pastor Torres. Con ello, el PSOE tiene ahora 97 senadores, y el PP, 125. Ramón Urrutia, de EA, sustituirá a Isabel López Aulestia, de IU].