Gallardón pide a la federación de vecinos sugerencias para revitalizar el centro

El consejero delegado de Economía y Participación Ciudadana del Ayuntamiento, Miguel Ángel Villanueva, y el presidente de la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM), Francisco Caño, firmarán hoy un convenio de colaboración para fijar "criterios estratégicos" con los que "revitalizar el centro", incluida la "cirugía" urbanística que el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, prometió en campaña.

Según el convenio, la FRAVM se compromete a elaborar dos documentos antes del próximo 13 de diciembre: un "informe programático", con las líneas maestras que los vecinos plantean para la reforma del centro; y un catálogo de propuestas concretas sobre vivienda, medio ambiente, comercio, movilidad y dotaciones. El coste previsto es de 45.000 euros, que pagará el Ayuntamiento.

Ambas partes constituirán una comisión de seguimiento paritaria que vigilará el cumplimiento de las medidas propuestas, aunque éstas "no serán vinculantes", como advirtió ayer el gerente de la Oficina del Centro, Javier Serrano. "El objetivo es saber cómo plantean los vecinos la reforma del centro, qué prioridades tienen. Tendremos en cuenta sus sugerencias", afirmó.

El plan de rehabilitación del centro urbano 2004-2008 fue una de las principales promesas electorales de Alberto Ruiz-Gallardón, pero va a paso de tortuga. "El plan está en marcha", asegura Serrano. Pero también admite que es ahora, a raíz de la colaboración iniciada con los vecinos, cuando se van a determinar los usos de muchos equipamientos -casones en ruina, conventos, palacetes- que el alcalde prometió convertir en instalaciones públicas.

Francisco Caño, presidente de la FRAVM, adelantó algunas de las propuestas que tienen en mente: "Nos gustaría que se recuperase el tranvía en el centro de Madrid, extender las restricciones al tráfico, eliminar infravivienda, levantar equipamientos para niños y ancianos, y cambiar ciertos usos de ocio. Ahora, todo el ocio de centro está enfocado a lo mismo: bares de copas, diversión de fin de semana. Creemos que hay que diversificar: crear ejes de ocio de calidad, introducir nuevos tipos de comercio... El centro de Madrid no puede ser todo un bar".