Tras las ventanillas

Miguel Cabrera Barroso, taxista onubense de 41 años, desconocía que la iglesia de San Pedro es la construcción cristiana más antigua de Huelva capital. Ahora sabe muchos otros aspectos de la historia de la ciudad. Los ha aprendido contrarreloj. En las últimas semanas, este taxista ha asistido, junto a otros 29 compañeros, a un curso sobre patrimonio histórico onubense, que lo ha formado para ser taxista turístico. Se trata de una iniciativa promovida por la Concejalía de Turismo del Ayuntamiento de Huelva y la Cooperativa Provincial de Autónomos del Taxi. El objetivo reside en fomentar el conocimiento de los recursos patrimoniales y de la cultura onubense entre los visitantes.

Los taxistas han recibido formación sobre la historia de calles clásicas, edificios con interés turístico y patrimonial, templos religiosos y monumentos. "El curso me ha servido para conocer muchas cosas que no sabía, como que el Cabezo de la Joya fue antes un castillo musulmán y que está rodeado de murallas fenicias. Yo ignoraba que en Huelva teníamos lugares de tanto valor histórico", señaló Miguel Cabrera. Este taxista luce en una de las puertas de su vehículo una pegatina que lo identifica: Taxi Turístico.

El Ayuntamiento ha distribuido folletos y material informativo en hoteles y puntos turísticos a fin de dar a conocer este servicio, que ofrece dos itinerarios de una hora en los que se recorrerán 15,5 kilómetros.

El primer recorrido se denomina El legado inglés y comprende la Casa Colón, el barrio de Bella Vista, el muelle del Tinto y el interior de la ciudad que incluye templos y lugares de interés. El precio oscila entre los 20 y 25 euros.

"Durante la visita explicamos de una manera amena la historia de los monumentos que visitamos, en qué fecha se edificaron. Todo. Se trata de informar de lo básico. Nosotros somos taxistas, no especialistas en arte", indicó.

Miguel Cabrera, que lleva 20 años en su profesión, sabe que el turista recurre muchas veces al taxista para preguntar qué visitar. "He hecho muchas veces de guía turístico a mi manera, con las cuatro cosas que uno sabe porque es de aquí. Ahora voy a estar preparado y voy a tener datos para proporcionar una información más detallada", destacó.

"Huelva tiene monumentos hermosos y no les damos importancia. Además, Huelva es muy diferente a otras ciudades porque se ha levantado amoldándose a los cabezos. Por eso tiene esa extraña estructura". Y agregó: "Al turista le llama la atención este montículo de tierra que divide la ciudad. El Cabezo de la Joya fue un acueducto de agua del siglo VIII antes de Cristo, que pasa inadvertido para los que somos de aquí. En uno de ellos se halla la única necrópolis tartesia que se conserva".