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El Consistorio rehabilitará en 2007 el recinto ferial de la Casa de Campo

El plan incluye la demolición de una veintena de pabellones "sin valor arquitectónico"

El gobierno municipal dio ayer el primer paso administrativo de una obra que no se acometerá hasta 2007; es decir, en el próximo mandato. Se trata de la remodelación del recinto ferial de la Casa de Campo, un espacio de 70 hectáreas en el que se levantan 60 pabellones, algunos protegidos y con más de medio siglo de existencia. El plan prevé demoler una veintena de pabellones "sin valor arquitectónico", rehabilitar el resto, construir un aparcamiento con 1.400 plazas en el límite del recinto y restringir el paso de coches.

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El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, anunció ayer la decisión de su gobierno de aprobar inicialmente el Plan Especial de este ámbito, previsto por el Plan General de Ordenación Urbana de 1997. Ruiz-Gallardón precisó que los trámites se prolongarán aún durante un año, y sugirió que las obras no podrán comenzar hasta 2007.

Pero las líneas maestras del proyecto ya están trazadas: el objetivo es "potenciar el carácter ferial del recinto, conseguir su esponjamiento mediante la demolición de edificaciones carentes de valor y en desuso; y recuperar su valor histórico, rehabilitando las instalaciones con valor arquitectónico", explicó el alcalde. Entre estas últimas se cuentan 13 edificios catalogados con protección 1, como el pabellón de La Pipa o el de Cristal.

Algunos de los que sí caerán probablemente bajo la piqueta -aunque la Concejalía de Urbanismo señala que ha abierto un periodo de alegaciones- son los inmuebles que albergan la Cámara Agraria de Madrid, las Oficinas del Patronato, el pabellón del Arroz, el de oficinas que linda con el pabellón de La Pipa, el Pabellón de Autoridades, varios bloques de la Policía Municipal y dos edificios pertenecientes a la Escuela de la Vid e Industrias Lácteas.

En torno al recinto ferial se establecerá un "anillo viario" para que los conductores lo rodeen, aunque al interior sólo podrán pasar los responsables de los pabellones. Los visitantes tendrán que dejar el vehículo a la entrada, en el aparcamiento actual o en otro que se va a crear con 1.400 plazas. El recinto se organizará en cinco zonas (ver gráfico). El alcalde subrayó que el soterramiento, ya en marcha, de la avenida de Portugal acabará con el "efecto frontera" entre la Casa de Campo y el distrito de Latina.

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