Un banco a todo gas

El Banco Bilbao Vizcaya Argentaria va a participar, junto con el Banco de Japón para la Cooperación Internacional y con varias entidades financieras japonesas en un proyecto que tiene como objetivo reducir las emisiones industriales contaminantes en los países de Centroamérica.

Así, el Banco de Japón para la Cooperación Internacional (JBIC), entidad financiera estatal, los bancos nipones comerciales el Mizuho Corporate Bank, el Bank of Tokyo Mitsubishi (BTM) y el Sumitomo Mitsui Banking Corporation (SMBC), así como el español BBVA, presidido por Francisco González, como único extranjero, han lanzado una iniciativa para cofinanciar con un crédito de 100 millones de dólares proyectos que reduzcan las emisiones de carbono en Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica, los cinco países centroamericanos.

Cien millones de dólares servirán para reducir las emisiones de carbono en Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica

Esa financiación, de la que 60 millones de dólares los aportará el JBIC y cada uno de los otros cuatro bancos contribuirá con 10 millones de dólares cada uno, se le dará al Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), entidad supranacional con sede en Honduras, que presentará los proyectos, en nombre de los países de Centroamérica, para reducir los gases de efecto invernadero en la región.

Proyectos cofinanciados

Así lo declara el director general de la sucursal del BBVA en Japón, Alfredo Zamarriego, quien llama la atención de que ésta no es sólo la primera vez que desde Japón un banco español, como en este caso el BBVA desde su sucursal en Tokio, cofinancia proyectos en Centroamérica en los que pueden participar empresas españolas, es también la primera vez que bancos japoneses cofinancian proyectos para disminuir esos gases contaminantes.

El BBVA ha sido invitado a ser parte del plan, negociado entre el JBIC y el BCIE, "por nuestra presencia en Latinoamérica, donde se nos reconoce como banco líder y por tener posibilidades de asumir riesgos comerciales y políticos, aunque esta operación está garantizada por el JBIC", afirma.

El JBIC deberá aprobar o desestimar los proyectos que le presente el BCI, que se ocupará tanto del desarrollo como del estudio de la viabilidad de proyectos y pedirá la autorización de los préstamos al JBIC, mientras que el Mizuho actuará como el banco agente.

El JBIC es el responsable de la promoción del comercio y de las inversiones niponas en el exterior y canalizador de todos los prestamos concesionales o ayuda oficial al desarrollo que da Japón, el segundo país, tras EE UU, que más asistencia ofrece a los países del llamado Tercer Mundo.

En los proyectos, con los que se quiere apoyar a empresas locales en proyectos de energía limpia y facilitar la adquisición de derechos de emisión de carbono a empresas japonesas, podrán participar éstas en asociación con otras españolas o de otros países.

Una de las condiciones será que las firmas niponas tengan derecho preferencial en la adquisición de los derechos de emisión de carbono que resulten de proyectos de energía limpia, como es el caso de la hidroeléctrica, para cumplir los objetivos del Protocolo de Kioto. Los proyectos que se cubrirán serán los que se enmarcan en el Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL) del Protocolo, es decir, los que generan fuentes de reducción de emisiones o impulsan inversiones en tecnología de energías sostenibles.

El MDL permite a los países industrializados comprar certificados de reducción de emisiones de carbono en países en vías de desarrollo. Los certificados podrán ser comprados, principalmente, por compañías japonesas, en especial, las de electricidad y/o acero, que son las mayores emisoras de gases invernadero. Adicionalmente, esos certificados podrán ser adquiridos por el Fondo para la Reducción de Emisiones de Carbono de Japón, establecido por el JBIC, que, a su vez, los distribuirá entre las firmas que participan en ese fondo.