La Corporación de Benicàssim queda en minoría por la crisis del PP

El equipo de gobierno de Benicàssim se ha quedado en minoría. El acto de rebeldía protagonizado el viernes por dos concejales el PP ha sido una señal más que patente de la crisis que arrastraba esta formación desde hacía meses. Los dos ediles votaron en contra de lo dictaminado como disciplina de partido, de manera que el equipo de gobierno, formado por populares e independientes, no pudo sacar adelante varios proyectos urbanísticos.

La crisis entre los socios del equipo de gobierno se reflejó en el pleno del viernes, durante el que el ejecutivo local no obtuvo los suficientes votos como para aprobar sus propias propuestas. A partir de ahora, las diferencias entre los socios de gobierno convierten en una incógnita las decisiones municipales. Ante esta incertidumbre, promotores y empresarios ya han manifestado su preocupación por el futuro de la localidad, según han denunciado los socialistas. Entre las propuestas debatidas el viernes se encontraba la de la aprobación de Benicàssim Golf, un Programa de Actuación Integrada (PAI) adjudicado a Lubasa hace dos legislaturas para la urbanización de más de dos millones de metros cuadrados. Los dos ediles populares dieron el no a una aprobación que el alcalde, el independiente Manuel Llorca, anunciaba desde hacía meses.

El presidente del PP de Castellón, Carlos Fabra, ya advirtió a ambos concejales del expediente de expulsión al que tendrían que enfrentarse después de que, en varios plenos y ante temas de menor trascendencia, mostraran su "disconformidad" con la posición de su grupo. Una de las ediles "rebeldes", Mari Carmen Asín, fue la que posibilitó que tras las elecciones gobernara el PSPV en coalición con el Bloc y EU, al negarse a dar su voto al candidato de la lista independiente. Posteriormente, esta misma edil fue indispensable para sacar adelante la moción de censura que acabó con la alcaldía socialista.

Mundo Ilusión

En este caso el PP sí expedientará y estudiará la expulsión de sus dos concejales, mientras que en el caso de Cabanes, la concejal de Urbanismo que no participó en la votación de adjudicación del PAI Mundo Ilusión, no ha recibido ninguna sanción.

El portavoz del Grupo Municipal Socialista en Benicàssim, Francesc Colomer, en un comunicado, se refirió al presidente provincial del PP en Castellón, Carlos Fabra, como "quien rompe su propio partido en Benicàssim por problemas urbanísticos", ya que "tiene prisa por aprobar un montón de PAI".

En opinión del diputado del PSPV, la política del PP está ofreciendo un "espectáculo lamentable", por lo que aseguró que el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, "tiene que reaccionar de una vez y dar un golpe de timón al modelo urbanístico y turístico que está promoviendo".