Rover Alcisa y Lubasa quieren construir 5.000 viviendas y un campo de golf en L'Estany de Cullera

Las constructoras Rover Alcisa y Lubasa presentaron ayer en Cullera un proyecto urbanístico sobre 5,5 millones de metros cuadrados en el sector Murtar-Marenyet, con 5.000 nuevas viviendas, 2.000 plazas hoteleras, un campo de golf, una desaladora y una depuradora. El proyecto, conocido como Cullera Viva, es uno de los cinco que se han presentado para la urbanización del Estany.

Según los promotores, la inversión prevista rondará los 4.000 millones de euros y se desarrollará en un plazo de 15 años. Las empresas destacaron del proyecto su sensibilidad medioambiental y la dotación de infraestructuras para mejorar la conexión por carretera de Cullera. Entre otras inversiones, los promotores destacan los 12 millones de euros para regenerar la vegetación de la laguna de L'Estany y de la desembocadura del Júcar. "El agua ni se contamina ni se explota", destacaban ayer las dos empresas, que gastarán otros 24,3 millones de euros en la construcción de una desaladora que garantice el abastecimiento de la población "sin necesidad de extraer agua del río Júcar", y una depuradora para reutilizar las aguas residuales. Otros 30 millones serán para instalaciones de energía solar, 31 millones para zonas verdes y otros 56 millones para la mejora de carreteras y accesos de Cullera; concretamente, la sociedad promotora se encargará de la apertura de un túnel en la montaña de l'Or y una nueva autovía de entrada a Cullera. El proyecto prevé una marina deportiva de 2.000 amarres, un campo de golf de 18 hoyos y 2.000 nuevas plazas hoteleras.

Además del PAI de L'Estany, aún por adjudicar, el Ayuntamiento de Cullera aprobó otro plan, conocido como de la Bega, donde se prevén 33 torres de 25 alturas y en el que participa el Instituto Valenciano de la Vivienda (IVVSA) de la Generalitat. También se ha presentado un tercer PAI, en la zona conocida del Brosquil, donde el grupo empresarial que lidera el ex presidente del Valencia CF Paco Roig proyecta 3.900 viviendas y dos campos de golf.

Por otro lado, la crisis del PP de Benicàssim y del equipo de gobierno del Ayuntamiento de la localidad quedó ayer patente en el pleno. El ejecutivo local no fue capaz de sacar adelante varios puntos. Entre otros, la aprobación de Benicàssim Golf, un Programa de Actuación Integrada (PAI) adjudicado a Lubasa hace dos legislaturas para la urbanización de más de dos millones de metros cuadrados. Dos ediles populares se saltaron la disciplina de voto y apoyaron el "no" a una aprobación que el alcalde, el independiente Manuel Llorca, anuncia desde hace meses.

El presidente del PP de Castellón, Carlos Fabra, ya advirtió a ambos concejales del expediente de expulsión al que tendrían que enfrentarse después de que, en varios plenos y ante temas de menor trascendencia, mostraran su "disconformidad" con la posición de su grupo. Una de las ediles rebeldes, Mari Carmen Asín, fue la que posibilitó que tras las elecciones gobernara el PSPV, en coalición con el Bloc y EU, al negarse a dar su voto al candidato de la lista independiente. Posteriormente, esta misma edil fue indispensable para sacar adelante la moción de censura que acabó con la alcaldía socialista.