El PP pide informes al Poder Judicial y al Consejo de Estado para demostrar que el texto es inconstitucional

El Grupo Popular presentó ayer en el Registro del Congreso la solicitud de tres informes -al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), al Consejo de Estado y al Tribunal de Cuentas- para intentar demostrar que el proyecto de Estatuto catalán es inconstitucional pues encubre, tras una aparente reforma estatutaria, una reforma de la Constitución. Esos informes tendrían que ser aportados a la Mesa del Congreso antes de que ésta analice el texto catalán. Según el Reglamento del Congreso, "si la Mesa considerase que se ha incumplido algún trámite constitucionalmente exigido o que el proyecto adolece de algún defecto de forma, se comunicará a la Asamblea que lo hubiera elaborado y se suspenderá la tramitación hasta que aquél se cumpla o se subsane éste".

El informe al Poder Judicial pide su opinión sobre los Títulos I (de derechos y deberes de los catalanes) y III (del Poder Judicial de Cataluña) por considerar que invade competencias constitucionales del CGPJ. Al Consejo de Estado se le pide informe de constitucionalidad del texto sobre la delegación de competencias del Estado que quiere asumir como propias Cataluña. Y al Tribunal de Cuentas sobre la pretensión del proyecto de designar a sus representantes en ese órgano.

Mariano Rajoy, líder del PP, anunció en Ceuta la petición de estos informes con el objetivo de que el proyecto catalán "se tramite como una reforma de la Constitución, que es lo que es". "Creo que no se puede crear un Estado confederal y que el modelo de Estado es el que tenemos en este momento. Y digo que las competencias del Estado las fijan las Cortes Generales y no el Parlamento de una comunidad autónoma, que no puede blindar sus competencias en un Estatuto", añadió Rajoy.

El líder del Partido Popular censuró además que el presidente del Gobierno dijera el miércoles que tiene "ocho fórmulas" para encajar la denominación de Cataluña como nación. "¡Qué es eso de que tiene ocho fórmulas! El presidente del Gobierno es un irresponsable. Me parece un cachondeo, una burla a los españoles, y creo que la gente se merece un respeto", concluyó.