Un cazador mata por accidente a otro y se quita la vida

La policía judicial de la Guardia Civil investiga la muerte de dos hombres, de 25 y 23 años, que fallecieron por impactos de proyectiles la pasada madrugada mientras realizaban caza furtiva en las inmediaciones de Linás de Marcuello, en el término municipal de Ayerbe, en Huesca. Pasadas las cuatro de la madrugada, la Comandancia de la Guardia Civil de Huesca recibió la llamada de una persona que se identificó como Jorge T. G. El comunicante informó de que su compañero había fallecido debido a un accidente de caza.

Inmediatamente acudieron al lugar efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, una patrulla de la 1ª Compañía de Huesca y el comandante del Puesto de Ayerbe, que localizaron los cuerpos sin vida de dos hombres, con indicios de haber muerto por impacto de proyectiles disparados por armas de fuego.

Uno de los fallecidos era Jorge T. G, de 25 años, el cazador que había informado a la Guardia Civil de la muerte de su compañero. El otro cadáver era el de ese otro cazador, Jaime Agustín P. E., de 23 años.

El presidente de la Comarca de la Hoya de Huesca y alcalde de Ayerbe, José Antonio Sarasa, aseguró tras visitar el lugar del suceso que, según las primeras indagaciones, uno de los jóvenes había resultado herido de forma fortuita por un disparo en la mandíbula que resultó mortal. Según las investigaciones, todo apunta a que el otro cazador reaccionó quitándose la vida. Ésa es la principal hipótesis, pero siguen abiertas las diligencias para esclarecer lo ocurrido.

Acorralados por jabalíes

Hay constancia de que el joven que telefoneó a la Guardia Civil realizó también otras llamadas en las que dio cuenta del fallecimiento de su compañero.

Fuentes de la investigación apuntan que el accidente se pudo producir al sentirse los cazadores acorralados por jabalíes. De hecho, un jabalí fue encontrado muerto junto a ambos cadáveres.

Los fallecidos son dos vecinos de Huesca. Jorge T. G. era natural de Linás de Marcuello. Los cuerpos fueron trasladados hasta el depósito de cadáveres del Hospital Provincial de Huesca.