El cierre de la M-50 se queda sin presupuesto del Estado debido a su impacto ambiental

El PP y el PSOE de la región se enfrentaron ayer a propósito de unos datos tan objetivos como son los Presupuestos Generales del Estado elaborados por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Antonio Beteta, portavoz popular, lamentó las escasas nuevas obras en Madrid (sólo el 4,73% de la inversión se dedica a este capítulo) y destacó que no habrá "ni un euro" para cerrar las autovías de circunvalación M-50 y M-40. Rafael Simancas, portavoz de los socialistas, contestó que el Ministerio de Medio Ambiente no ve viable cerrar la M-50 por el fuerte impacto medioambiental que supondría para El Pardo, y resaltó la subida presupuestaria para Madrid respecto al año pasado (8,8%, 203 millones más), según sus cuentas.

Unos mismos presupuestos y dos maneras muy diferentes de interpretarlos por parte del PP y PSOE. Los populares volvieron a referirse a la "asfixia" para calificar la actuación del Gobierno central respecto a la Comunidad de Madrid, mientras que el PSOE alabó el proyecto "moderno y progresista" que, según ellos, representa el proyecto de los presupuestos del Estado. La única cifra en que estuvieron de acuerdo los dos partidos es en la cantidad que el Gobierno aportará a Madrid en 2006, 2.593 millones de euros. De esta cifra, la mayor parte se destinará a infraestructuras (1.126 millones) y medio ambiente (205 millones).

Los ferrocarriles absorberán 539 millones; el aeropuerto de Barajas -que ya está prácticamente finalizado- recibirá 500 millones, y las carreteras 86 millones más.

Beteta, portavoz del PP, cree que los presupuestos suben un 5,63% en términos absolutos (136,5 millones de euros más que en 2005) y lamenta la escasa inversión en nueva obra (sólo un 4,73% del total). Añade que, por el contrario, la subida media en España en el capítulo de inversiones es del 11,5%, es decir, seis puntos más que en la Comunidad de Madrid.

Incremento del 8,8%

Simancas rechaza tajantemente las cifras esgrimidas por Beteta. El líder socialista eleva la subida presupuestaria en Madrid al 8,8% y destaca que es la tercera comunidad por inversión estatal, sólo por detrás de Andalucía y Cataluña, si bien admite que ambas regiones tienen más población.

El portavoz socialista rebaja, además, la subida media de la inversión en España al 6,2%, frente al 11,5% que afirma Beteta. La diferencia entre las dos estimaciones económicas radica en que el PSOE toma como cifra referente para ofrecer sus datos el presupuesto de 2005 frente al de 2006. Sin embargo, el PP elige como punto de comparación las cantidades que el Gobierno central prevé que gastará antes de que acabe 2005 y las compara con las que aparecen reflejadas en los presupuestos de 2006. Como los gobiernos, por lo general, siempre gastan menos de lo presupuestado, ya que se producen incidencias en las obras, las diferencias entre los cálculos de ambos partidos son grandes.

El PP lamenta que además del escaso incremento de la inversión prevista en 2006, el año pasado las inversiones estatales ya se rebajaron un 25% con respecto a 2004, lo que produjo en Madrid, según el PP, una disminución de la inversión en 800 millones.

El PP se queja de que en los presupuestos del Estado haya desaparecido la partida destinada al cierre norte de la M-50, y "sólo" haya 140.000 euros para la ampliación de la radial de peaje (R-3) hasta Tarancón (Cuenca). El cierre de la M-50 es una de las reivindicaciones del Gobierno de Esperanza Aguirre, que ha llegado a afirmar que si el Ejecutivo central no termina la carretera lo haría ella. De hecho, hace escasas fechas el Gobierno regional ha hecho público el proyecto de construcción de este cierre, que incluye un gran túnel bajo el monte de El Pardo.

Simancas respondió que el cierre de la M-50 carece de presupuesto porque el Ministerio de Medio Ambiente tiene un informe donde se descarta cerrar la carretera bajo El Pardo debido al "enorme" impacto medioambiental que generaría. Sobre la M-40, el portavoz socialista afirmó que el Gobierno central va a arreglar los accesos a los distritos de San Blas y Vicálvaro, que quedaron "aislados" cuando se construyó la R-3 (una autopista de peaje). A propósito de ésta, el socialista respondió a Beteta que si hay tan poco dinero presupuestado es porque la autovía tiene una concesión y que será la empresa la que tenga que poner el dinero, no el Gobierno central, que sólo tiene que hacer el estudio.