Altadis refuerza su estrategia defensiva

Altadis está capeando el temporal de unos mayores impuestos al tabaco y de una caída en el consumo de cigarrillos en sus principales mercados con medidas drásticas, pero con cierta holgura (Deutsche Bank y JP Morgan acaban de elevar el precio objetivo de sus acciones). La hispano-francesa está apostando a fondo por las cajetillas de bajo coste, ha iniciado la recta final de un nuevo reajuste (Trabajo le ha autorizado un expediente de extinción de 899 contratos) y acaba de vender su 50% en las tabacaleras canarias Cita y Tacisa.

Trabajo autorizó a la tabaquera, en pleno mes de agosto, la extinción de 898 contratos en España mediante prejubilaciones y bajas incentivadas

La tabacalera, que inició la semana con una subida del 5,3% en los impuestos que gravan el consumo de cigarrillos en España, anunció el jueves la venta de sus participaciones del 50% en Cita Tabacos de Canarias y en Tabacos Canary Islands (Tacisa) a su rival británico Grupo Gallaher por un importe total inicial de 32 millones de euros. Al tiempo, Altadis ha ampliado su actual acuerdo de licencia con Cita para las marcas Celtas, Bisonte, Lola, Piper y Un-X-2 por un periodo de 10 años. Es la primera operación corporativa desde la llegada a la presidencia de Altadis de Antonio Vázquez.

Cita tiene fábricas en Canarias, República Dominicana y Portugal; emplea a mil trabajadores, y controla una cuota de mercado del 4,1% en cigarrillos y del 9,4% en cigarros en la Península y Baleares. Altadis asegura, sin embargo, que su participación en las tabacaleras isleñas siempre tuvo carácter financiero.

La hispano-francesa se ha sumado con algún éxito, por otra parte, a la estrategia adoptada previamente por sus competidoras de poner a la venta cajetillas de cigarrillos a bajo coste (en torno a 1,65 euros, frente a los casi tres euros de las marcas más conocidas) para alentar el consumo y hacer frente a la presión impositiva y de las autoridades sanitarias en contra de este hábito.

La marca de tabaco de bajo precio de Altadis, Ducados Rubio, se convirtió este verano, en su primer mes de vida, en una de las más vendidas de su segmento.

Un arma de doble filo

El segmento de tabaco de bajo precio ya supone, según datos de los siete primeros meses del año, casi un 10% del total del mercado español de cigarrillos. La demanda de estas cajetillas de bajo precio ha provocado, sin embargo, un fuerte descenso de las principales marcas, especialmente en Fortuna, con una caída del -10,8% frente a sólo el -0,4% de Marlboro. Este hecho ha convertido a Marlboro en la marca más vendida en España, con una cuota del 17,25% frente al 15,55% de Fortuna.

A pesar de los buenos datos, los expertos de Ahorro Corporación no consideran que el éxito de Ducados Rubio sea bueno para Altadis porque socava su marca estrella, Fortuna, y le depara menos ingresos y peores márgenes.

Los citados expertos apuntan además que los Gobiernos van a combatir esta política de cigarrillos de bajo coste con mayores impuestos al consumo. Y en esta línea cabe enmarcar la subida del 5,3% de esta misma semana destinada a financiar el déficit sanitario. Un incremento fiscal cuya repercusión negativa sobre el Ebitda (resultado bruto de explotación) de Altadis va a ser limitada, según estimaciones de los analistas de Espirito Santo Research, y no va superar el 1%, "aunque abre las puertas a nuevas subidas en el futuro". Aproximadamente un 20% del Ebitda de Altadis proviene de la venta de cigarrillos en España. El viernes la hispanofrancesa subió cinco céntimos el precio de sus cajetillas de Ducados y Fortuna, también incrementó el coste de Gsuloises y Gitanes.

Bajas y prejubilaciones

El mayor logro de Altadis en los últimos meses para reducir costes y mantener la rentabilidad ha sido la obtención de la luz verde del Ministerio de Trabajo, en agosto, en pleno periodo vacacional, del conflictivo expediente de regulación de empleo de la tabacalera Altadis. El ministerio autoriza la extinción de 898 contratos mediante prejubilaciones y bajas incentivadas. La multinacional anunció este plan, que incluía cierre de fábricas en Francia y España, reducciones de plantillas y reordenación de producciones y centros de trabajo, en 2003, aunque no ha empezado a aplicarlo en España hasta mayo de este año.

Las extinciones se distribuyen entre los siguientes centros de trabajo: 39 en Alicante, 176 en Cádiz, 40 en Logroño, 21 en Palazuelo, 170 en Cantabria, 209 en Sevilla y 243 en Tarragona. También podrán acogerse a estas medidas, de forma voluntaria, otros trabajadores en Alicante, Logroño, servicios centrales, I+D y sector de ventas.

Altadis, por otra parte, a través de Corporación Habanos, de la que controla el 50%, sigue potenciando uno de sus negocios de mayor crecimiento y más lucrativo, el de los cigarros. Hace unos meses abrió una Casa del Habano de gran dimensión en Shanghai, el principal centro comercial y de consumo de China, que va a ser la cabeza de playa de su desembarco en el gigantesco mercado asiático.