El tripartito propone en su moción contra Rabanera aumentar las inversiones y los servicios fuera de Vitoria

El programa de gobierno que ultiman los partidos del tripartito (PNV, EA y EB) para la moción de censura que formalizarán la semana próxima contra el diputado general alavés, el popular Ramón Rabanera, tendrá como hilo conductor la búsqueda del "reequilibrio en el territorio", según avanzó ayer quien será su candidato, Álvaro Iturritxa.

Los tres partidos entienden, afirmó Iturritxa, que la fuerte concentración que se produce en Vitoria exige actuaciones de compensación con el resto de la provincia, aumentanto las inversiones y los servicios. El portavoz peneuvista hizo este anuncio tras una reunión de los tres socios.

El programa está "prácticamente cerrado", precisó el portavoz de EA, Lauren Uria. Hay ya "consensos importantes" en todas las áreas y ninguna divergencia insuperable, añadió el representante de EB, José Miguel Fernández, mientras Iturritxa cifró en "más de un 95%" las materias ya acordadas, a falta sólo de definir "el trazo fino". Ninguno de ellos detalló contenidos concretos, pero Iturritxa destacó que la búsqueda de ese "reequilibrio" en favor de la provincia estará en la base de todas las propuestas.

Todo lo que se comprometan a emprender los tres partidos irá en la dirección de "corregir ese desequilibrio", que, a juicio del portavoz peneuvista, causa carencias en el resto del territorio. Iturritxa vino a señalar que ése será el hilo conductor de las políticas de servicios sociales, de promoción de inversiones o de financiación de entidades locales.

El PNV se ha reunido esta semana con representantes de la ilegalizada Batasuna para hablar sobre las mociones de censura en la Diputación y el Ayuntamiento, según reveló ayer la portavoz de los independentistas en la provincia, Matti Iturralde.

Mientras, el alcalde de Vitoria, el popular Alfonso Alonso, definió ayer las mociones de censura como una "cortina de humo" tendida por los tres partidos del Gobierno de Juan José Ibarretexe para desviar la atención de su propia precariedad.