PSOE y PP piden la dimisión de la alcaldesa de Marbella tras la expulsión de dos ediles andalucistas
PSOE y PP solicitaron ayer la dimisión de la alcaldesa de Marbella, Marisol Yagüe, ante la "crisis" abierta en el equipo de gobierno tras la expulsión de dos de los tres ediles andalucistas, Carlos Fernández y Pedro Pérez, acusados de irregularidades. Una situación que se ha visto agravada por la dimisión, que se produjo ayer, de la tercera concejal andalucista, María José Lanzat, lo que deja definitivamente a Yagüe en minoría. Socialistas y populares estudian además someter a la regidora a una cuestión de confianza durante la celebración de un pleno extraordinario convocado al efecto.
"Que se vayan", espetó el secretario general del PSOE en Marbella, Antonio Rodríguez Leal, en alusión a Yagüe y su equipo. Rodríguez Leal consideró que el municipio "necesita una regeneración urgente". Y anunció que su partido pedirá a la regidora, "como último acto de dignidad política", la creación de una comisión mixta con la oposición para investigar las supuestas coacciones a trabajadores para que se afiliasen y diesen un 2% de su sueldo al PA. "Nunca comprendimos como un partido serio como el PA se metió en esa conspiración de delincuencia política. Se lo han ganado a pulso", añadió.
La presidenta del PP local, Ángeles Muñoz, abogó porque la Junta de Andalucía pida al Gobierno la disolución del Ayuntamiento, una petición en la que coincidió por la mañana el concejal socialista, Silvestre Puertas, que consideró que las acusaciones contra Pérez y Fernández "no tienen parangón". Sin embargo, Puertas, que recordó que la mayoría de los concejales tienen un proceso abierto, se desdijo después de que el consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrias, asegurase que el ejecutivo autonómico no contempla por el momento promover la disolución.
El consejero sí garantizó que la Junta actuará "en la medida de sus posibilidades" para evitar que se conculque la ley o los intereses generales de los ciudadanos, y consideró "absolutamente insostenible la situación de desgobierno de Marbella". "Los problemas de Marbella no se van a resolver hasta que haya elecciones", opinó por su parte el presidente del PP andaluz, Javier Arenas.La alcaldesa, Marisol Yagüe ordenó por la mañana cambiar las cerraduras de la tenencia de alcaldía de Puerto Banús, en la que se encontraban las delegaciones de los ediles expulsados, Carlos Fernández y Pedro Pérez, "para evitar que desaparezcan documentos". Fernández, sin embargo, arremetió contra la primera teniente de alcalde, la tránsfuga socialista Isabel García Marcos, a la que culpó de estar detrás de esta decisión. Según Fernández agentes de la policía local estaban en la puerta "con una lista diciendo quién entraba y quién no".
Yagüe sostuvo que los funcionarios se limitaron a comunicar a los trabajadores que "permanecieran tranquilos en sus puestos y que al haber cesado a los responsables de las delegaciones debían ponerse a su disposición". La regidora ha asumido de momento las delegaciones de Fiestas, Turismo, Limpieza, Medio Ambiente y Puerto Banús, hasta ahora del PA. No contempla reestructurar el equipo de gobierno hasta la próxima semana.
Carlos Fernández auguró en conferencia de prensa que las áreas más importantes pasarán a manos de García Marcos, a la que acusó de realizar un interrogatorio "inquisitorial" a los trabajadores denunciantes y sin la presencia de los sindicatos. Aseguró que todas las acusaciones son falsas, y anunció que presentará una querella contra la ex edil socialista "por vulnerar derechos fundamentales de la Constitución y dañar el honor del partido".
Actuación de oficio
Fernández también afirmó que cuatro de los trabajadores que declararon ante la comisión de investigación se han retractado ante notario de sus denuncias iniciales contra el PA, un acta que insistió ha remitido ya a la Fiscalía. Por su parte, el ministerio público, que ya abrió diligencias de investigación tras recibir la denuncia de un particular, pedirá de oficio los resultados de la información reservada del Ayuntamiento si éste no se los remite antes del lunes.
"Yagüe va a sentir en sus carnes la oposición del PA", amenazó Fernández, que explicó que la alcaldesa "quiere formar un grupo político bajo la batuta de García Marcos, con gente más dócil y que acate órdenes". La versión de la regidora es muy distinta. Subrayó que Fernández y Pérez han coaccionado a los trabajadores para que no declaren en la comisión de investigación, y han presionado a otros para que se retracten de sus testimonios. Además, estudia abrir un nuevo proceso "ante el incremento de testimonios tras los ceses".
Tras la ruptura del pacto con el PA, la regidora se prepara para gobernar en minoría. "Ha habido muchísimas mociones y licencias que se han aprobado de forma unánime", recuerdan en el Ayuntamiento.
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