_
_
_
_
BUENAFUENTE DIJO
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Demasiada siesta veraniega

Estas vacaciones he descansado. Mucho. Quizá demasiado. He dormido tanto que ya no sabía ni quién era. ¿Saben cuando te levantas de una siesta y crees que tienes la cabeza más grande? Pues, peor. Llegué a tal nivel de enajenación que vi Aquí hay tomate, los faltones de la sobremesa. Un día dicen: "Hoy vamos a comparar los pechos de Sara Montiel con los de Marujita". No me extraña que luego haya gente que quema los bosques. Hay mucha rabia acumulada...

Volando no voy

Este verano se han caído muchos aviones. ¿Sí o no? Las compañías de bajo coste ya no aportan confianza. Primero quitan el periódico, luego la comida, después el caramelito... luego un motor... Cuando te quieres dar cuenta estás volando Madrid- Caracas en ala delta. Además sólo hay un paracaídas ¡y lo lleva el piloto...!

Luego pasan cosas como la avería del Discovery. ¿Se acuerdan? Los americanos tendrían que empezar un plan renove con sus naves. Al final lo arregló un astronauta con unas tijeras, cortando un trozo de moqueta del fuselaje. ¡Ponle parquet coño, que es para toda la vida!

Que llueva, que llueva

Este verano no ha llovido nada. Uno, que es solidario, por no beber agua de boca se ha dedicado a beber sólo cerveza, de boca. Pero nada, los pantanos seguían bajando. Imagínense los monstruos que viven dentro. Ese monstruo con su familia, con el agua por los tobillos: "Qué pasa, qué pasa...". Bueno, en algunos pueblos había restricciones tan estrictas, que si tenías sed, tenías que chupar las manchas de humedad de la pared. Las caras de Bélmez estaban acojonadas...

El Congreso del PC

El Congreso de los Diputados se ha modernizado y ha instalado ordenadores con Internet en los escaños. Yo pensaba: ¿Y qué sistema operativo usarán? ¿El Windows "ZP"?

Digo yo que para ser diputado ahora se pedirán conocimientos de informática a nivel de usuario. Los que más ventaja van a tener son los diputados de IU, que ya llevan años manejando el "PC".

O los del PP, que ya se han instalado la tarifa ZaPlana, que permite replicar al gobierno las 24 horas del día al doble de velocidad. O incluso el ministro Bono, que hace tiempo que ya ha abierto su propio blojjjjjjjjjj.

En cambio, a otros diputados esto de la informática ya les pilla un poco tarde, como a Labordeta, que lo primero que preguntó fue: "¿Si mi ordenador tiene virus, hay que hervirlo como los biberones?" (...) O como Celia Villalobos, que dijo: "Cuando escribo el password me salen asteroides". Y quería decir asteriscos, claro.

La informatización del Congreso va a tener muchas ventajas. Por ejemplo: ¿Que la cagas con la gestión de los incendios y se te quema medio Galicia? Pues le das al Control-Alt-Dimitir; ¿Que la ministra de vivienda viste mejor que tú? Le mandas el virus I love you.

Tener un ordenador en el escaño también servirá para liberar tensiones. Y no me entiendan mal... (por si acaso será obligatorio tener las dos manos sobre la mesa...). Me refiero a que servirá como terapia antiestrés. Por ejemplo, Acebes ya le ha puesto a sus archivos el nombre de los políticos del PSOE. Así, cuando tiene que borrar uno, el ordenador le pregunta: "¿Seguro que desea suprimir Zapatero?". Y él: "¡Sí, sí, sí...!"

La mala educación

Según un estudio, el 60% de los españoles justifican las bofetadas a los niños para educarles. El otro 40% no las justifican: les pegan y a callar. Luego el niño: "Papá ¿por qué me pegas si no he hecho nada?" "Yo qué sé. Ya te lo dirá el psicólogo cuando seas mayor". Pim, pam...

La verdad es que un tema serio y demasiado habitual, a juzgar por los datos. Pero bueno, ¿qué quieren? Si nada más nacer ya nos coge el médico y ¡plas, plas! dos cachetes. Y el doctor: "No. Eso es para que llore y así empiece a respirar". Si quiere que llore, no le pegue hombre, ¡póngale un partido de la Selección Española!

Lo que deja claro el informe es que en la pedagogía actual hay dos vertientes claras: los galletistas (que sueltan galletas) y los que lo hablan todo. Que no sé qué es peor. A veces hay padres tan pesaos que los hijos prefieren la violencia. Imagínate que te toca ser hijo de Sánchez Dragó: ¡¡Por dios, cállate y pégame ya, papá, acabemos de una vez!!

Ahora la educación de los niños comienza antes. Algunos le ponen música clásica al feto y todo. El hijo de unos amigos nació llorando la novena de Beethoven. Y claro, los niños salen más listos. Cuando les dices: "Hijo ha llegado el momento que hablemos de sexo". Te responden: "Vale, ¿qué quieres saber?".

En fin, quizás soy el menos indicado para hablar de educación porque todavía no me he reproducido. No se por qué, me atasco siempre en el principio del proceso. Pero cuando lo haga, no pienso pegar a mi hijo. Llego a casa a las dos de la mañana y tampoco le voy a despertar para eso, ¿no?

José Antonio Labordeta.
José Antonio Labordeta.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_