El 'caso Egüés' llega a la Cámara

El caso Egüés llega al Parlamento navarro. La segunda comisión de investigación abierta este año en el Legislativo foral, tras la que analizó el caso Otano, quiere aclarar las responsabilidades por un escándalo que salpica a UPN, partido del que eran cargos públicos o responsables los principales implicados en una trama de especulación urbanística y presunto enriquecimiento ilícito. Los protagonistas dejaron su militancia en la formación y abandonaron su residencia en Navarra.

La investigación se solapa con el proceso penal que tramita el juzgado de Aoiz por presuntas prevaricación y cohecho. Pese a ello, los parlamentarios desean escuchar a los once imputados y elaborar sus propias conclusiones. Las comparecencias comenzarán el próximo martes.

El ex alcalde posee varios pisos, parcelas, empresas, un local y cuatro BMW

Egüés, con unos 4.000 habitantes, es el municipio navarro con mayor nivel de renta de la comunidad foral y Gorraiz, una urbanización de gran lujo promovida por la constructora Flores en su término municipal.

Su alcalde entre 1999 y 2003, Ignacio Galipienzo, era un activo abogado de 33 años con muy estrecha relación con la cúpula regionalista. En noviembre de 2003, tras un periodo de dudas y alusiones a la presunción de inocencia, UPN le obligó a dimitir y dejar el partido. Ya se conocían las evidencias de que había dado permiso para construir un apartotel en una parcela reservada a uso escolar, así como de su elevado patrimonio. La posterior investigación reveló las conexiones empresariales que unían al alcalde con Construcciones Flores, propietaria de la promotora del apartotel, y con algunos de sus consejeros de la misma.

La consejería de Ordenación del Territorio, en manos de CDN, impidió que se construyera el hotel y forzó al Ayuntamiento, que sigue gobernado por UPN, a revocar las licencias. Sólo con la previa compraventa del terreno una empresa tapadera ganó ya un millón de euros.

Galipienzo y su esposa, Eva Iglesias, abandonaron Egüés en febrero de 2004. En plena madrugada hicieron la mudanza y se trasladaron a vivir a Madrid.

La trama es más amplia y el Parlamento navarro escuchará estos días las versiones de los once imputados. Entre ellos destaca Emilio Izquierdo, director general de Industria entre 1996 y 1999 y consejero de Apartamentos Gorraiz. Izquierdo ha sido consejero de numerosas empresas contratistas de obra pública en Navarra. Su esposa, Margarita Merlo, era presidenta del comité local de UPN. El matrimonio abandonó la comunidad foral al conocerse sus actividades.

Galipienzo declaró antes de dimitir que ganaba 90.000 euros anuales por su dedicación política y sus negocios privados, pero la realidad era muy distinta. En 2003, ganó 500.000 euros, según el informe pericial que obra en poder de la juez de Aoiz. Su lista de propiedades incluye viviendas en Egüés, Mijas (Málaga), Cascante y Tudela; parcelas urbanizables en Egüés, A Coruña y San Feliú de Guixols; un local comercial en Pamplona, cuatro vehículos de la marca BMW y la propiedad de empresas inmobiliarias y de asesoría financiera radicadas en Madrid. A través de una de ellas cobraba sus servicios al Grupo Aricam, promotor del frustrado apartotel que levantó la liebre sobre sus actividades.

En su declaración ante el juez, Galipienzo reconoció haber percibido una comisión de 138.000 euros por conceder la licencia para el apartotel, que fue pagada por Construcciones Flores. La Cámara de Comptos, órgano fiscalizador de Navarra, confirmó múltiples irregularidades en la gestión del ex alcalde.

Las sesiones tienen, por ahora, carácter abierto, pero seis de los citados han pedido que no estén presentes periodistas. La comisión debe dilucidar previamente ese extremo. Las sesiones se alternarán esta semana con las declaraciones de los investigados en otro caso de presunta corrupción, el de la Fundación Humanismo y Democracia.