El Consistorio anuncia un plan integral para la calle del Desengaño

El concejal presidente de la Junta del Distrito Centro de Madrid, Luis Asúa, anunció ayer que el Ayuntamiento llevará a cabo un plan integral para las calles del Desengaño, de Tudescos, de Barco y la plaza de Santa María Soledad Torres Acosta con el fin de evitar que se agrave la degradación social que sufre.

Estas céntricas calles están tomadas por toxicómanos, prostitutas e indigentes y muchos comercios han cerrado. Las zonas comunes están abandonadas y sucias.

Por eso, el Consistorio ha realizado un "inventario" de los problemas que afectan a este barrio, y próximamente presentará un plan integral. "Lo que se necesita es actividad, inversiones y más seguridad que permitan que este lugar se regenere y evolucione", explicó.

"Los dos diques que impiden la inversión y el avance son Tirso de Molina y la calle del Desengaño", manifestó Asúa. El Consistorio ha proyectado en la plaza de Tirso de Molina un mercado de flores, ya en construcción. "Desengaño necesita algo más que un mercado, necesita un plan integral que de respuesta a todas las necesidades", agregó.

Nuevas dotaciones

La Asociación de Vecinos del Barrio de Universidad pidió ayer que el Ayuntamiento retome el plan de conservación del barrio y planifique nuevas dotaciones municipales en la zona.

Desde que en el verano de 1998 se realizara una operación urbanística financiada con fondos del plan Urban de la Unión Europea, los vecinos dicen que no se ha vuelto a invertir más. Entonces, se instalaron cientos de farolas y bolardos para adecentar las calles.

Sin embargo, las dotaciones municipales faltan. En todo el barrio sólo hay seis espacios públicos: un centro cultural, una oficina para educadores, un centro para la tercera edad, la unidad de Policía Municipal, el Área de Gobierno de Medio Ambiente y un servicio de urgencias."Nos queda una asignatura pendiente por resolver, que es la degradación de las calles del Desengaño, de Tudescos, de Barco...", admitió ayer el concejal de Centro.

El Ayuntamiento reconoció así que el deterioro de este espacio es un punto que debe solventar, como uno de los objetivos que se había marcado en el Plan de Revitalización del Centro Urbano, uno de las promesas electorales de Ruiz-Gallardón.

El proyecto de regeneración de este distrito pretendía recuperar la vitalidad de la almendra central de la capital, creando "un centro más habitado, más habitable y más integrado".

Para ello, Gallardón propuso una mejora de las condiciones de la vivienda y una oferta satisfactoria de servicios y equipamientos públicos. Ahora, el Ayuntamiento ha anunciado que realizará un nuevo plan integral para solucionar las carencias de un espacio más reducido, en el barrio de Universidad, que continúa con los mismos problemas que tenía cuando se presentó el proyecto de revitalización.

40.000 vecinos

Los vecinos piden que las dotaciones municipales -que en estos momentos se reducen a seis en todo el barrio-, se amplíen con un polideportivo municipal, centros de días para mayores, un espacio para los jóvenes y un nuevo centro cultural para los más de 40.000 vecinos del distrito.

"No necesitamos que sean construcciones nuevas, sino que se aprovechen los edificios que hay abandonados para estas nuevas dotaciones municipales", explicó la presidenta de la asociación de vecinos del barrio, Isabel Rodríguez.

Ésta propuso que el ala izquierda del centro Conde Duque, que en estos momentos está sin utilizar, sea el nuevo centro cultural del barrio. Además, la antigua escuela de la guerra, en la calle de Santa Cruz de Marcelado, podría servir, según Rodríguez, de polideportivo municipal ya que tiene las instalaciones adecuadas y no está en uso.

El Consistorio explicó ayer que varias parcelas de la zona están en proceso de expropiación para convertirlas en dotaciones municipales. El Palacio de Altamira (Flor Alta, 8), una parcela vacante en la calle Antonio Grilo, el Palacio de la Infanta Carlota (Luna, 32), las Escuelas Pías de San Antón y dos parcelas en las calles de Dos Amigos y Cabeza serán futuros espacios cívicos. Sin embargo, el centro integrado para jóvenes y mujeres que estaba en proyecto en la calle Corredera de San Pablo, se dedicará finalmente a vivienda social.