Un juez da luz verde a la reforma de la M-30 en el barrio del Pilar

El Juzgado número 8 de Madrid ha desestimado la petición de la asociación de vecinos La Flor, del barrio del Pilar, de suspender las obras de reforma de la M-30 a su paso por esta zona norte de la capital. El tribunal considera que los trabajos en esta vía están considerados como de "interés general para los ciudadanos". Los jueces sostienen que la reforma "intenta solucionar los graves problemas de funcionamiento de la autovía y reducir sus insufribles congestiones de tráfico".

Según el Ayuntamiento, el fallo ratifica una resolución jurídica anterior del Juzgado número 11, que desestimó la demanda interpuesta en febrero del año pasado por el Colegio de Arquitectos de Madrid. Asimismo, da la razón al gobierno local, que cuenta ya con el permiso para seguir con las obras.

Ambas sentencias recogen la queja por las obras del bypass que, según los vecinos, suponen la tala de más de 2.000 árboles en la avenida de Monforte de Lemos y en los parques Norte y de la Vaguada y "graves daños de difícil reparación" en sus casas y en su entorno.

Alarma y preocupación

José María Ortega, director general de Organización y Gestión de Proyectos del Ayuntamiento, subrayó que en la sentencia la juez destaca que no se acreditan los daños en las viviendas del barrio que aseguraban los vecinos y que los proyectos de los dos túneles no están en ejecución en este momento, sino que están aplazados hasta que comience la denominada Operación Chamartín. Ortega recordó a los madrileños que las obras no deben suponer "alarma ni preocupación para los vecinos de la zona".

El defensor del Pueblo, Enrique Múgica, pidió el pasado julio al Ayuntamiento más información sobre los daños que podría causar a los edificios de la calle de Monforte de Lemos (Fuencarral) la construcción del doble túnel o bypass norte de la M-30. Además, Múgica solicitó al Consistorio que repensara fórmulas alternativas para esta obra que los vecinos de la zona ven con pánico. La reforma no se acometerá en esta legislatura, según la Concejalía de Urbanismo.

El escrito de Múgica fue hecho público por los residentes para salvar a los árboles de la tala y a sus casas de posibles peligros. Los afectados, que llevan un año manifestándose y solicitando, en vano, una reunión con el alcalde, fueron recibidos el pasado febrero por el Defensor del Pueblo, a quien entregaron 10.000 firmas.

El proyecto de obra prevé un doble túnel con ocho carriles que discurrirá, según los vecinos, "a dos metros" de los cimientos de más de un centenar de edificios de 12 plantas y obligará a la construcción de dos salidas de humos en sendos parques del barrio.