"He pensado en el 'Columbia' cada día"

"He pensado en el Columbia cada día", dijo ayer Eileen Collins en rueda de prensa con sus seis compañeros del Discovery. Contó que llevaban a bordo una foto de los siete astronautas muertos. "No es que la necesitáramos para recordarlos, pero queríamos tenerla", añadió.

"La tripulación del Columbia creía en su misión y nosotros debemos completarla", señaló esta mujer de 48 años, que en 1999 fue la primera comandante de un transbordador. "Algunos dicen que debemos parar, pero vamos a seguir. Necesitamos que nos apoyen. Mejoramos la vida de todo el mundo al explorar el espacio". Antes del aterrizaje, tras desechar la NASA la posibilidad de Florida, Collins fue más parca en palabras. "¿Qué te parece una bella y clara noche, con brisa en la pista, en el desierto de California?", le preguntó Ken Ham, un astronauta que se encargó ayer de las comunicaciones desde el centro de control. "Estamos preparados para lo que tengamos que hacer", dijo escueta Collins.

La comandante tomó los mandos cuando la nave ya viajaba a una velocidad menor que la del sonido y efectuó el aterrizaje sin instrumentos. Antes todo el proceso estuvo controlado por ordenador.